In communitatis historia o En la historia de la comunidad
el fallecimiento del cura César Cordero Moscoso pasará a la posteridad como la más
desgraciada muerte de todas cuantas la vida ha permitídonos presenciar, pues
su deceso, acaecido el 4 de febrero del año del Señor de 2023, apenas ha sido
novedad, mientras un inexpugnable misterio revolotea tintineante sobre sus
exequias mortales sin que nadie conozca cuándo fueron realizadas, ni dónde enterraron
su cadáver o quién le dio cristiana sepultura ad vitam aeternam in nomine
Christi. Parecería como si el personaje hubiérase esfumado, sub
specie instantis, en los crueles vientos del olvido y el desprecio de
la morlaquía, olvidado de Dios y de los hombres a causa de sus escándalos
de pederastia que hicieron que perdiérasele el respeto y la veneración que en décadas
acrisoló para sí, a fuer de haber forjado un culto a su personalidad en los institutos
educativos que gestó ad perpetuam rei memoriam con la Universidad
Católica de Cuenca a la cabeza.
In calamitatis via, un hecho circunstancial pregonado como uno más de los múltiples reconocimientos que acreditó en su vida sería la flamígera chispa que encendió la fatídica conflagración de su rocambolesca desgracia in nostra Sancta Mater Ecclesia: el anuncio de la Municipalidad de Cuenca, en abril del año 2018, de que entregaríasele la PRESEA SANTA ANA DE LOS RÍOS DE CUENCA, gestionada por la Universidad Católica de Cuenca, por él fundada, en la sesión solemne del 12 de abril de aquél fatídico año. No bien la prensa daba cuenta de la honrosa designación, la cual entrégase a las personas que han realizado trascendentales servicios a la ciudad, desatóse una campaña de denuncias de delitos de pederastia cometidos por el religioso entre 1950 y 1960. El escándalo de tales denuncias hizo que las víctimas cuestionaran con acritud y agrura la entrega de la presea obligando a Cordero a renunciar a ella en vísperas del día en el que íbaselo a homenajear.
El primer denunciante llámase Jorge Palacios, quien para tal fecha contaba con 63 años de edad e indignado in extremis salió del anonimato al declarar que, cuando fue un niño, Cordero habíalo violado varias veces. Enseguida, aparecerían dos denunciantes más, envalentonados por el primero, para hacer público que en sus infancias fueron también víctimas del cura pederasta que, in diebus illis, hallábase en la edad provecta, frisando los 90 años de edad. Los nefandarios abusos habían acaecido en la escuela Miguel Ortiz de la Sociedad Obreros de la Salle, donde Cordero ejercía una capellanía.
Post factum, en mayo del año 2018 una serie de manifestaciones públicas en las calles de la urbe organizáronse para solicitar que César Cordero fuera juzgado por la Silla Apostólica a fin de retirarle su título de sacerdote de la Santa Madre Iglesia Católica, Apostólica y Romana, alcanzado en 1953.
In via iustiaie, la Arquidiócesis de Cuenca, que siempre habíale protegido, vióse obligada a instaurar un proceso legal en su contra y la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, el dicasterio de la curia romana que encárgase de los abusos sexuales de los sacerdotes en todo el orbe católico, envió a Cuenca a dos delegados, Jaime Ortiz de Lazcano Piquer, en rol de investigador, y Luis Aldaz Salazar, como notario, a fin de investigar las denuncias y entrevistarse con César Cordero, quien negaba los crímenes que imputábansele y al ejercer su derecho a la defensa redactó un documento en el que rebelábase en contra del Santo Padre Francisco I, quien ha mantenido una política de tolerancia cero ante los abusos de pederastia cometidos por sacerdotes en la Iglesia Católica.
La rebeldía de César Cordero ante el Santo Padre
Francisco I muéstranos, in via claritatis, su prepotencia y
autoritarismo, tanto como su carácter posesivo, características esenciales de
su modus
actuandi de sacerdote abusivo, arrogante y autocrático que siempre hizo
de las suyas, per fas et per nefas, sin que nadie hubiérale puesto en su
sitio llegando a ser temerario y temido por sus súbditos, entre los cuales si acaso
no éranle obsecuentes y sumisos con la llamada obediencia per inde ac cadáver, no
podían ser sus favoritos, pues Cordero no solamente fue un monstruo pederasta
sino un ser de polarizadas pasiones entre el ferviente amor y el implacable
odio. Por eso es que las denuncias de pederastia que hundiéronlo en la vida
comunitaria de la capital de la morlaquía fueron una especie de lectio
vitae o lección de vida, pues solo así pudo saborear el trago amargo de
la humillación y el menosprecio cuando cayósele la careta para aparecer su vera
effigies sicut sacerdos horribilis in nostra Sancta Mater Ecclesia.
1953
In honorem veritatis dígase que Cordero redarguyó en su defensa que los acusadores eran extorsionadores en búsqueda de dinero, siendo cómplices de los delitos, mientras la ofensa al Sumo Pontífice consistió en señalar, en tono altisonante, que a causa de pedir perdón a las víctimas de abusos sexuales ha bajádose al nivel de los malhechores para «congraciarse con los enemigos de la Iglesia».
Dicha defensa debíasela mantener
en confidencia pero Cordero hízola pública al entregarla a la revista AVANCE,
cuyo desfachatado director, Rolando Tello, buscando sensacionalismo amarillista,
lo publicó in extenso para provocar la iracundia y la furia de la Curia Arquidiocesana
de Cuenca que, el 2 de junio del año 2018, ante la escandalosa actitud de Tello
para difundir el documento de condición reservada, hizo un pronunciamiento aclaratorio
de que habíase violado la confidencialidad de la investigación que la Santa
Sede llevaba a cabo ante las denuncias de pedofilia que volviéronse un
fulgurante infierno para Cordero in vita communitatis. La Curia hacía
hincapié en que el cura Cordero había violado la confidencialidad del proceso agravando
su situación personal como imputado.
1953
Ad concludendi, el Vaticano impondría de iure -al finiquitar el proceso investigativo- la máxima sanción que el Derecho Canónico prescribe para estos casos calificados como «DELICTA GRAVIORA» in lingua latina semper aeterna. Tal sanción es la suspensión A DIVINIS del ministerio sacerdotal del religioso. En otras palabras, la Santa Madre Iglesia retiró el sacerdocio a César Cordero pasando a ser el primer ex cura de la Iglesia Católica cuencana a causa de estos nefandarios crímenes que en la investigación probáronse como verídicos, incriminando a Cordero como autor de los nefandos abusos sexuales a las víctimas que, in honorem iustitiae, habíanlo denunciado.
Ad absurdum, a inicios del mes de junio, por efecto rocambolesco, acaeció en la Ciudad Eucarística y Mariana una horripilante ignominia en contra del cuadro original del milagro de la Dolorosa del Colegio San Gabriel, que visitaba Cuenca por octava vez en 112 años del prodigio del 20 de Abril de 1906. El absurdo hecho ignominioso fue protagonizado por el cura jesuita Rolando Calle, SJ, a quien ocurriósele la advenediza idea de que los escándalos acaecidos en torno a César Cordero Moscoso harían que los cuencanos atenten en contra del cuadro del prodigio de la Dolorosa, como si los dos hechos hubiérense interconectado per se.
Así pues, el 2 de junio del
año 2018, en el desfile de promociones del colegio «Rafael Borja», realizado con motivo de los 80
años de su fundación, el cura Calle estafó a Cuenca al hacer desfilar en tal evento
un cuadro falseta de la Mater Dolorosa haciendo que los
cuencanos creyeran estúpidamente que miraban en las calles de la urbe a la auténtica
efigie de la Dolorosa del Colegio cuando lo que veían era una réplica de la
taumaturga imagen quiteña.
Toda esta absurda tragicomedia con la Mater Dolorosa aconteció por una estupidez que raya en estolidez y denota suma estulticia en Rolando Calle, el perencejo jesuita que siendo autor de la nefandaria ignominia en contra de la Dolorosa hoy es el rector de la Unidad Educativa Particular Borja, en el instante de la muerte de César Cordero, quien es ex alumno de la V promoción de bachilleres del Borja. Cèsar Cordero era hijo de Ricardo Cordero Espinosa, el último de los 13 hijos del presidente Luis Cordero Crespo. Su madre fue Elena Moscoso Tamarìz, quien murió cuando César tenía 8 años de edad, en 1935. Huérfano de madre, César Cordero Moscoso pasó a la tutela de Miguel Cordero Crespo, el dueño del Niño Viajero, quien sería como su padre adoptivo y bajo su dirección César ingresó al colegio jesuita de Cuenca en el año del Señor de 1941.
A pesar de que cuando fue estudiante secundario, entre los años 1941 y 1947, César Cordero Moscoso destacóse como un brillante alumno de los jesuitas y luego, durante su vida, como uno de los más febricitantes amantes de la Mater Dolorosa, Mater Clementissima inter nos, la Unidad Educativa Particular Borja no ha publicado una nota luctuosa en su fan page de Facebook, como hácelo cada vez que muere un ex alumno borjino, incluso con aquellos que, la verdad sea dicha, han llevado un bajo perfil in vita societatis.
In honorem matris Dolorosae, la suprema veneración de César Cordero hacia la Mater Dolorosa habíase incrementado in crescendo porque en el año en el que graduábase en nuestro querido colegio Borja el cuadro original del prodigio del 20 de Abril de 1906 visitó Cuenca por vez primera, el 27 de abril de 1947, hecho de eternal reminiscencia que inflamó en el entonces bachiller jesuita una fortísima pasión por la Mater Dolorosa, a punto tal de haber gestado para el Austro ecuatoriano un bello santuario mariano a ella dedicado en el campus de la Universidad Católica de Cuenca, extensión de Azogues, cuando celebrábase el centenario del milagro de la Mater Dolorosa, en el año 2006.
Mas la ingratitud amplifícase hasta las fronteras máximas
de la indignación, en la Universidad Católica de Cuenca, puesto que, la verdad
sea dicha, en su fan page de Facebook no ha publicádose ninguna nota luctuosa,
por mínima que fuere, sobre el deceso de César Cordero Moscoso, el fundador del
centro educativo, en un cuestionable acto que irrádiase de ingratitud y revístese
de soflama, puesto que no entiéndese cómo no puédase discriminar que la
pederastia del cura es abominable ad summum al socaire de que, más allá
de sus pecados mortales, es el gestor de una comunidad educativa católica profundamente
arraigada en la comunidad, la cual jamás habríase gestado si César Cordero no
hubiese existido en la vida del siglo.
Pero la ingratitud es aún más atroz con el actual rector
de la Universidad Católica de Cuenca, Enrique Pozo Cabrera, quien ocupa el
rectorado del alma mater corderiana porque César Cordero habíale considerado
el más leal de sus súbditos cuando en el mes de agosto del año 2013 hubo de
retirarse de la rectoría de la Universidad Católica a causa de graves achaques
a su salud. Dígase pues que, para calibrar la infame ingratitud de Pozo, resulta
anecdótica una memoria escrita por el propio cura Cordero en el libro de sus
memorias publicado a sus 90 años de edad, in Anno Domini 2017, la cual transcribímosla
ad
capite ad calcem porque narra el doloroso instante en el que Cordero
dejaba de presidir el centro de educación superior por él fundado buscando a
quien creía el mejor de sus pupilos como su sucesor. Dice pues Cordero ad
pedem litterae: «Hube de rogarle en nombre de Dios y en
atención a la vigencia de tan compleja obra, se dignó ofrecerme su asentimiento».
Rebus sic stantibus/ Estando así las cosas, la ola devastadora de la memoria de César Cordero vino como un búmerang cuando la Universidad Católica de Cuenca retiró todos sus retratos y las inscripciones que habíanse colocado en los locales de la universidad corderiana con los pensamientos del religioso. Retiráronse, a la vez, las placas epigráficas que perennizaban a César Cordero en la historia, de todo sitio en donde ubicábanse como una huella de su trayectoria, en el campus de la Universidad Católica de Cuenca y sus extensiones. Quid pro quo, el Gobierno Provincial del Azuay le retiró la presea Huayna Cápac que habíasela conferido en el año 2004, mientras el Ayuntamiento cuencano, con fecha 11 de junio, acordó «revocar y dejar sin efecto los premios, preseas, acuerdos, condecoraciones y en general todo reconocimiento entregado a favor del Dr. César Cordero Moscoso, por parte del I. Concejo Cantonal, el GAD Municipal del Cantón Cuenca, las Empresas Públicas Municipales y todos sus entes adscritos».
Tal resolución firmábala el entonces alcalde Marcelo Cabrera, usualmente timorato y escurridizo para poner la pica en Flandes, junto a quien, in illo tempore/ en aquel tiempo, fungía como vicealcaldesa de Cuenca, la cuestionada Ruth Caldas con todos los concejales de la época.
El clímax de la iconoclastia surgida como imbatible huracán
en contra de la memoria de César Cordero llegó al paroxístico límite de la exageración
cuando su estatua colocada en el frontispicio de la Basílica de la Santísima
Trinidad, por él construida con admirable gusto estético, fue derribada a fuer
del cataclismo con el que borrábase de la historia toda huella que evoque a su
recuerdo in urbe nostra dilectissima. Pero la exageración con la cual
actuábase alcanzó los ribetes que bordean la ridiculez cuando junto con la
estatua del cura depredador derribáronse aquellas que el pederasta religioso
habíalas erigido como merecidos homenajes a su padre adoptivo y protonotario
apostólico, Miguel Cordero Crespo, así como a los obispos Daniel Hermida Ortega
y Manuel de Jesús Serrano Abad, en una absurda patochada que raya en la
jerigonza y la fachosa ridiculez in communitate nostra.
Mysterium noctis, los cuencanos miraban absortos y patidifusos la apocalíptica profanación de la efigie de César Cordero Moscoso, tal como cuando en la Unión Soviética, una vez que derribóse el muro de Berlín, destruyéronse todos los monumentos de Lenin, de Marx y de Stalin como si ellos representaran a Mefistófeles in regnum tenebrarum ab intra societatis.
Pero como ningún acto de iconoclastia es perfecto para
borrar del mapa a un ser divino o humano, aún permanece en Cuenca, la Atenas
del Ecuador, una solitaria placa broncínea que refulge luminosa, en la casa
Cordero, recordando las célebres ejecutorias de César Cordero Moscoso apud
flumina Tomebamba. Tal inscripción epigráfica dice ad perpetuam rei memoriam:
«A su fundador y maestro/ Dr. César
Cordero Moscoso/ mantenedor de las glorias familiares. /Universidad Católica de
Cuenca y la familia Cordero. / Junio 2000».
Consummatum est/ Todo está consumado hubo de decirse en el año 2018 cuando las huellas de César Cordero desaparecieron, sub specie aeternitatis, de todos los locales de la Universidad Católica de Cuenca en la capital de la morlaquía y en sus extensiones en algunas ciudades del austro ecuatoriano como Azogues, Cañar y Méndez. Ad interim, cinco denuncias presentadas a la Fiscalía perturbaban los días de Cordero tristis et afflictis in via dolorosa.
De pronto, mientras la vida de César Cordero Moscoso volvióse una pesadilla, en sus últimos años de vida terrenal, recluido en una inaccesible suite dentro del hospital universitario católico por él fundado, la ingratitud de Enrique Pozo Cabrera para su mentor y benefactor convirtióse en abominable vanidad y egolatría al suplantar el busto de bronce del cura Cordero, en el campus de la Universidad Católica de Cuenca, sede de Azogues, con el suyo propio, en uno de los más ridículos e hilarantes ejemplos de exacerbada vanidad super flumina Burgay. La horrible testa de Pozo Cabrera vislumbra la falta de talento del escultor a quien habrásele encargado la tarea frente al exquisito gusto estético que caracterizó a César Cordero, como hombre culto, ilustrado, inteligente y acucioso, más allá de sus oprobiosos crímenes sexuales que desatan pasiones inmundas en espíritus enfermos rivalizando con el aberrante espíritu depredador del cura pederasta in vita civitatis. Qué duda cabe que en este histórico caso el refrán de nuestra perínclita lengua de Castilla vivifícase in veritatis splendor: «acciones crean pasiones».
Pero como vanitas vanitatum, omnia vanitas est/
vanidad de vanidades, todo es vanidad, para que el pecado sea mortal,
Enrique Pozo Cabrera llegó más allá de lo esperado al haberse mandado a fabricar
una ridícula placa broncínea en donde dejó inscrito sus complejos pues la fachendosa
inscripción epigráfica dice in scriptis: «PERSONAJE DE ESTIRPE ESCLARECIDA» O
sea, a diferencia del cura Cordero, quien infundió un culto a su personalidad
dentro del alma mater corderiana a base de sus ejecutorias, Pozo Cabrera
no valdría nada por sus acciones sino por la ostentación de su supuesto abolengo
de aristocrático pedigré. Leamos pues otra vez el texto de la ridícula placa broncínea que perennízalo en
Azogues de manera cantinflesca ad futuram rei memoriam: «Personaje de estirpe esclarecida…».
Ad nauseam,
asevérese también que la ingratitud con el cura Cordero no es solamente de
Enrique Pozo Cabrera, su sucesor en el rectorado de la Universidad Católica de
Cuenca, sino también de uno de sus más
asquerosos esbirros y tiralevitas, el fementido obispo de Azogues bautizado con
el nombre de Oswaldo Vintimilla Cabrera, el bárbaro purpurado que destruyó las
lámparas patrimoniales de la catedral de Azogues, las cuales fueron apreciadas
y queridas por César Cordero Moscoso, a quien Vintimilla ha seguido en todo
trance hasta obtener, por el arte de birlibirloque, la intercesión de Cordero para su nombramiento episcopal. Ni
siquiera por este indignante palanqueo -que
lo catapultó sin méritos al episcopado- Vintimilla ha sido capaz de
celebrar siquiera una MISA DE REQUIEM
por el cura pederasta a quien bajaron del altar in via iustitiae super flumina
Tomebamba in Anno Domini 2018.
Desde el año 2018, cuando César Cordero
Moscoso decidió silenciarse ad vitam aeternam, para pasar
desapercibido con bajísimo perfil, luego del escándalo de su suspensión a
divinis aplicada por la Silla Apostólica, los días de su existencia terrenal
han sido turbios y grises, in hac lacrimarum valle, siendo imposible que
puédase conocer cómo vivía en su inexpugnable suite del hospital universitario
católico. De vez en cuando, por la muerte de un judío, ha filtrádose algún dato
sobre su estado de salud, cada vez más deficitario por graves problemas
circulatorios que aniquiláronlo y consumiéronlo hasta amputarle las piernas, en
esta época pandémica, llegando a un estado de postración en el que sus órganos
han debilitádose por las disfunciones metabólicas de su avanzada edad, sin
perder la lucidez y la conciencia con las cuales habrá escarmentado sus
nefandarios crímenes sexuales ejecutados contra sus víctimas que volviéronse
como fieras feroces y hambrientas de venganza y depredación hacia el
desgraciado presbítero cuya vida es una especie de calamitatis
exemplum o ejemplo de calamidad que vuélvese
aleccionador para cualquier otro monstruo pederasta que hállese infiltrado ab intra ecclesiae in vita communitatis.
Habiendo soñado un día que su nombre habría de ser epónimo y esclarecido en la comunidad cuencana junto a los relevantes personajes históricos de su familia en la morlaquía, Cordero vióse obligado a renunciar a las vanidades del mundo a causa de su desgraciada suerte una vez que fuera castigado por sus crímenes sexuales. Así, sábese que su último deseo fue que su muerte no publicitárase y sus exequias fuesen secretas in mysterium vitae, por lo que, a la hora de su partida a la Casa del Padre, nadie sabe dónde ni cómo fue enterrado para evitar que la vindicta pública de sus víctimas, de sus detractores y odiadores pudiera llevar a la profanación de su tumba. Sospéchase que sus restos mortales han ido a parar en Surampalti, sitio en donde erigió el templete que perenniza la memoria de su egregio abuelo, Luis Cordero Crespo, el Grande, así llamado para diferenciarlo del ilustre alcalde de Cuenca Luis Cordero Crespo, quien era su nieto y homónimo de esclarecida prosapia literaria.
Cual ironía de la humana existencia,
hubo de ser una de sus víctimas, Jorge Palacios, quien echaría al traste la excelsa
fama de César Cordero Moscoso enviándola al abismo de las huestes infernales en
un santiamén, de la noche a la mañana, puesto que de no haber sido por este personaje,
Cordero habría recibido en vida la más alta condecoración que puédese alcanzar
en el Ayuntamiento cuencano, la presea SANTA
ANA DE LOS RÍOS DE CUENCA, y su muerte hubiese sido noticia de primera
plana con delirante concurrencia de ciudadanos y hasta una declaratoria de
duelo nacional por tres días, mientras el sepelio habría sido apoteósico en la
capital de la morlaquía, tal como cuando un refulgente sol eclípsase dejando
tristeza, soledad y consternación in solidaritatis via.
Pero independientemente de la suerte de César Cordero Moscoso para pasar a la eternidad sin los fastos de la gloria ni la parafernalia de la loca veneración de vaca sagrada o la excelsa vanidad de su egotista personalidad, más allá de su aberrante modus actuandi y de sus sicalípticos gustos que lleváronlo a cometer nefandarios crímenes calificados como delicta graviora in ius canonicum, nadie podrá desconocer, in honorem veritatis, que el personaje fue un cuencano que amaba a la urbe con alma, vida y corazón. A la hora de su partida a la Casa del Padre es el Señor, Providentissimus Deus, quien sabrá juzgarlo por sus pecados mortales, por los que en su vida terrenal ya fue castigado con el desprecio y el descrédito de la comunidad cuencana en donde, más allá de los fanatismos feroces que levántanse en su contra no puédese desconocer que Cordero era un ex alumno de los jesuitas, que amaba a la Mater Dolorosa con beatífica piedad, y un ser con extraordinarias capacidades de gestión para haber fundado una comunidad educativa católica, hoy manejada con liviandad y ligereza, que orbita en el horizonte cultural de la morlaquía con relevante presencia sub specie aeternitatis, aunque dentro de ella háyanse eliminado todas las huellas de su fundador como si sus trascendentales acciones pudiéranse borrar por la iconoclastia con la que derribáronse sus estatuas, sus placas epigráficas, sus óleos, sus preseas, sus reconocimientos y condecoraciones adquiridas in communitatis vita, ab intra ecclesiae. Nihil novum sub sole dixit in sacra scriptura in veritatis via, sed in vita societatis in omnia humani generis. Requiescat in pace ad vitam aeternam in nomine Christi, pater César Cordero Moscoso, ex sacerdos in Sancta Romana Ecclesia, antiquus Societatis Iesu alumnus et conchense filius in civitatis historia. Requiem aeternam dona ei Domine et lux perpetua luceat ei omnes clamamus in nostra Sancta Mater Ecclesia sicut fratres in unum in via caritatis.
Diego Demetrio Orellana
Datum Conchae, mensis
februarii, die octavus, currentis Anno Domini MMXXIII, octava Dominica in septuagésima.
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OPINIONES CIUDADANAS
DE: Rolando Tello
PARA: DIEGO DEMETRIO ORELLANA
FECHA: 11 de febrero del año 2023
MENSAJE RECIBIDO DESDE EL WHATSAPP DE TELLO:
No se puede ser envidioso y
feliz al mismo tiempo. Elige qué quieres ser. La envidia ciega a los hombres y
les imposibilita el pensar con claridad.
FIRMA: Rolando Tello
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SEÑOR ROLANDO TELLO:
PAX TIBI IN VIA VERITATIS
Me parece insolente que reacciones tú de esta manera frente a mi ensayo histórico intitulado: «CÉSAR CORDERO MOSCOSO Y SU DESGRACIADA MUERTE IN URBE NOSTRA». Quiero ratificarme, IN HONOREM VERITATIS, que lo que he dicho frente a tu revista AVANCE y tu persona es la VERDAD: «ROLANDO TELLO, SIEMPRE AMARILLISTA Y ALTERANDO LA HISTORIA DE CUENCA». Para demostrarlo permítome transcribir, hic et nunc, las siguientes expresiones tuyas, en tu investigación sobre César Cordero Moscoso, aparecida en la revista AVANCE del mes de junio del año 2018. En tu deplorable reportaje, con el subtitulo «EL MILAGRO DEL TÍO BISABUELO» aseveras la siguiente barbaridad con la cual atropellas a nuestra historia, a causa de tu inveterada negligencia investigativa que seguramente es la que te impide pensar con claridad a ti. Copiamos en rojo tus palabras de verbo ad verbum: «…El 20 de agosto los médicos le desahuciaron y antes de entrar en inconciencia, invocó al padre Emilio Moscoso, su tío bisabuelo, inmolado el 20 de mayo de 1887 en el colegio San Felipe de Riobamba, durante una sacrílega invasión soldadesca al templo». Esto que escribiste es una barbarie infame en contra de la verdad histórica pues el tío bisabuelo de César Cordero Moscoso, el hoy beato Emilio Moscoso Cárdenas, SJ, jesuita mártir de la Eucaristía, no murió inmolado el 20 de mayo de 1887 como equívocamente dices tú, sino el 4 de mayo de 1897, en su dormitorio ubicado en la segunda planta del colegio «San Felipe Neri» de la ciudad de Riobamba, en plena lucha de liberales de la masonería diabólica y conservadores, bajo la sangrienta irrupción de las tropas alfaristas al colegio de los beneméritos padres jesuitas in Riobambensis urbe. O sea que el martirio del tío bisabuelo del padre César Cordero ocurrió 10 años después de lo que tú señalas y 16 días antes de lo que registraste en tu deplorable reportaje. Es por este tipo de yerros que son frecuentes en cada edición de tu revista AVANCE que yo he permitídome señalar, in via claritatis, que tú atentas en contra de la verdad histórica en tus investigaciones, como para que me vengas a invocar sofismas estúpidos con el ánimo de defenderte de lo indefendible. Hemos dicho la verdad frente a la revista AVANCE y solo la verdad y tu reino de las tinieblas no podrá ser más poderoso que nuestro reino de la luz in via veritatis in communitate nostra.
DIEGO DEMETRIO ORELLANA
Datum Conchae, mensis februarii, die XII, Anno Domini
MMXXIII
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*Sobre ciertas protestas en contra de la muestra "The
Temple of Arutam" en Cuenca*. En mayo del 2018 se realizó por las calles del
centro de Cuenca la marcha «A Romper el Silencio»: sectores de la ciudad se
manifestaron ampliamente en contra del ex cura pederasta César Cordero Moscoso,
de sus violaciones y abusos sexuales a decenas de niños. ¿Estaban ahí grupos
ultra religiosos y conservadores como “Tradición y Acción”, tomando una posición
crítica en contra de Cordero? No estuvieron. ¿Acaso alguna vez se han
manifestado en sus medios y redes sociales, o por las calles, en contra de un
ser tan nefasto como el ex cura, o de actos tan abominables como la pederastia
clerical en Cuenca, en el Ecuador, en el mundo? Pues no. Dentro de su, a sí
misma respetable libertad de culto y expresión, han preferido estos días
organizarse en inflamadas jornadas para reclamar en contra de la recientemente
inaugurada muestra plástica «The Temple of Arutam» del artista Eduardo Moscoso,
expuesta en el Salón del Pueblo de la CCE, Núcleo del Azuay. «¡Acto de
Reparación a los Sagrados Corazones de Jesús y María!» se lee en sus letreros y
en los flyers virtuales que circulan, al haberse sentido ofendidos por pinturas
y esculturas expuestas. Ofenden más objetos inanimados, sus temáticas y
estéticas particulares en un contexto artístico y cultural, que los actos y los
victimarios de pederastia o de femicidio, en Cuenca y el Ecuador. Es para esos
seres humanos que deberíamos estar pidiendo no solo reparación, sino verdad y
justicia. Como para el caso de Jorge Palacios (primero en denunciar a Cordero),
o el reciente de Maribel Castillo, cuyo violador y asesino aún no aparece. Y
tantos más. Pero pareciera que para ciertos sectores, duele más una
representación de rasgos religiosos que no entra dentro sus cánones
fundamentalistas que las vidas, integridades y dignidades de personas que han
sido víctimas. Incluso, víctimas por parte de sus mismas huestes católicas y
cristianas. Pero, en esas marchas nunca los veremos.
Falco Pmm
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DILECTISSIME
FRATER FALCO: PAX TIBI. CON TODO RESPETO QUIERO APORTAR A TU DEBATE SEÑALANDO QUE LA MUESTRA DE
EDUARDO MOSCOSO HA SIDO COMO TÚ DICES: «raza, mijines, ñeros, homies, causas...».
O SEA, UNA FANESCA CUARESMAL IN VITA CIVITATIS. PERO CONSTE QUE NADIE
HA CENSURÁDOLA PUES CUENCA ES LA CAPITAL DEL PENSAMIENTO ECUATORIANO Y YA NO
ESTAMOS PARA ESAS AVENTURAS DE CRUZADA MIEDEVAL APUD FLUMINA TOMEBAMBA....
NADIE HA CENSURADO A UNA OBRA QUE VUÉLVESE A MOSTRAR CON 40
AÑOS DE RETRASO... SÍ... ESO ES LO QUE SE ESTÁN OLVIDANDO TODOS LOS QUE
COMENTAN TUS POSTS. TRÁTASE DE UNA OBRA QUE FUE REALIZADA HACE 40 AÑOS Y QUE HA
PRETENDÍDOSE CON ELLA PROVOCAR UN MAREMAGNUM EN LA CAPITAL DE LA
MORLAQUÍA COMO SI LA AMADA URBE FUERA TODAVÍA LA CAPITAL DEL CONSERVADURISMO DE
LOS FINISECULARES TIEMPOS DEL SIGLO DÉCIMO NONO IN HISTORIA LIBERTATIS.
LO ÚNICO RESCATABLE QUE HA PROVOCADO TODO ESTE GALIMATÍAS HA
SIDO, DESDE MI PUNTO DE VISTA, QUE LA MUESTRA HA PERMITIDO REFLEXIONAR SOBRE LA
TRISTE Y DESGRACIADA MUERTE DEL CURA CORDERO, QUIEN MURIÓ COMO UN INSECTO POR
EL QUE NADIE LLORA TRISTIS ET AFFLICTIS IN VIA DOLOROSA. UN ABRAZO FRATERNAL IN
HONOREM ARTIS ET SECUNDUM ARTEM, DILECTISSIME FALCO:
Diego Demetrio Orellana
OCTAVA I DOMINICA IN QUADRAGESIMA IN
ANNO SALUTIS NOSTRAE MMXXIII
*********************
Estimado Diego Demetrio Orellana:
Gracias por tu comentario, pero debo decirte, así como ya te
lo dije en otro momento, que no estoy de acuerdo con los criterios que emites
en contra de Eduardo Moscoso, que es mi amigo, así como tampoco estoy de
acuerdo con algunos criterios de tu artículo sobre el pederasta cordero, mismo
que he leído, así la mayoría de tu escrito tenga una posición crítica contra
él. Pero, no estoy de acuerdo con párrafos de tu texto, sobre todo al final,
que parecerías alabarlo y defender las "buenas acciones" de él. Así
que, con todo respeto, igualmente, te digo que prefiero que no te expreses así
de Eduardo, sobre todo porque ya te di mi opinión al respecto, pero esas
expresiones tuyas en un post público mío se mantienen. Tampoco estoy de acuerdo
que compartas acá un artículo de tu pluma que tiene partes que personalmente me
hacen ruido, me provocan incomodidad. Creo que ya has compartido tu artículo en
muchos espacios, así que no es necesario lo cuelgues acá. Preferiría no tener
ese tipo de contenidos concretos tuyos, sobre Eduardo y sobre cordero, en este
hilo. Gracias por entender.
Falco Pmm
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DILECTISSIME Falco Pmm: «UNITAS IN DIVERSITATE/ UNIDAD EN LA
DIVERSIDAD». ESA
ES LA CONSIGNA DE UNA AMISTAD SINCERA. ASÍ QUE YO RESPETO TU PENSAMIENTO Y
AGRADEZCO POR RESPETAR EL MÍO. NO TENEMOS POR QUÉ COINCIDIR EN TODO LO QUE
PENSAMOS PARA QUE SEAMOS AMIGOS IN COMMUNIO CARITATIS... ES
IMPORTANTE QUE UN AMIGO SEA LA ANTÍPODA DE UNO MISMO IN VIA FRATERNITATIS ET IN
HONOREM LIBERTATIS. ERGO, IN HONOREM AMICITIAE NOSTRAE,
ACOJO TU PETICIÓN Y PARA NO INCOARTE EN NADA NO COMPARTIRÉ MÁS, DENTRO DE TU
MURO, NI MI ARTÍCULO SOBRE LA DESGRACIADA MUERTE DEL CURA CORDERO NI MIS
CRITERIOS SOBRE EDUARDO MOSCOSO IN URBE NOSTRA DILECTISSIMA. Y CON
ESTO, COMPLÁCEME MUCHO SALUDARTE IN VIA AMICITIAE NOSTRAE PARA
SILENCIARME HIC ET NUNC IN RESPECTUM ET REVERENTIA INTER NOS... AUGURI
VIVISSIMI IN HONOREM ARTIS ET SECUNDUM ARTEM DILECTISSIME FALCO.
DIEGO DEMETRIO
OCTAVA I DOMINICA IN QUADRAGESIMA IN ANNO SALUTIS
NOSTRAE MMXXIII
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Qué excelente artículo sobre un escabroso tema que la Iglesia
Católica suele soslayar por vergüenza. Frontal y sin tapujos has abordado el
eterno dilema de la virtud y la pasión humana. Saludos dilecto amigo Diego Demetrio..
Edwin Chávez
Medina
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MUCHAS GRACIAS POR APRECIAR MI
ENSAYO HISTÓRICO INTITULADO CÉSAR CORDERO MOSCOSO Y SU DESGRACIADA MUERTE IN
URBE NOSTRA. VERDADERAMENTE, PROCURÉ OBJETIVIDAD ANTE UN ASUNTO DE VERAS
ESCABROSO, COMO TÚ LO DIAGNOSTICAS IN STRICTA IUSTITIA. UN ABRAZO FRATERNAL IN
VIA AMICITIAE NOSTRAE.
DIEGO
DEMETRIO
OCTAVA I
DOMINICA IN QUADRAGESIMA IN ANNO SALUTIS NOSTRAE MMXXIII
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Pace ai vivi. Riposo eterno
ai morti
Giuseppe Sac Di Bella
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DIEGO
DEMETRIO
DOMINICA IN SEXAGESIMA IN ANNO SALUTIS NOSTRAE MMXXIII
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Trovo scandaloso questo fatto, la Virtù non è più apprezzata
in un mondo alla deriva come il nostro, che la sua anima riposi in pace
Maria
Cristina Matarazzo
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DAVVERO È COSÌ COME TU DICI BENISSIMO MIA CARA Maria Cristina
Matarazzo. IL PADRE CORDERO MOSCOSO HA IL BISOGNO DI RIPOSARE IN PACE MA LA MIA
COMMUNITÀ DELLA MIA CITTÀ NON HA CELEBRATO NESSUNA MESSA DI RÉQUIEM PER LA SUA
ANIMA PECCATORA PERCHE LUI ERA PEDERASTA E CI SONO ODIO E MANCANZA DI CARITÀ
PER LUI DOPO LA SUA MORTE. REQUIESCAT IN PACE AD VITAM AETERNAM IN NOMINE
DOMINI PATER CESAR CORDERO MOSCOSO IN NOSTRA SANCTA MATER ECCLESIA.
DIEGO DEMETRIO
II DOMINICA IN QUADRAGESIMA IN ANNO
SALUTIS NOSTRAE MMXXIII
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Hay
Dieguito, lo que se hace con la mano se borra con el codo...
Rolando Farez Lucero
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DE: Jorge Suarez <jorgesuar1@yahoo.com>
Para:diegoorellana2002@yahoo.es
Fecha: sáb, 11 feb a las 17:05
Diego estoy sin computadora y he leído este artículo en el celular. Soy
sincero... quedé impresionado pero sin el atrevimiento necesario para opinar.
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MI ESTIMADO JORGE SUÁREZ: NO ES PARA MENOS, PUES ESTE ENSAYO HISTÓRICO ABORDA UN TEMA ESCALOFRIANTE QUE PUEDE DEJAR A MUCHAS PERSONAS SIN PALABRAS PERO HEMOS BUSCADO OBJETIVIDAD, SINE IRA ET STUDIO, EN EL ENFOQUE HISTÓRICO CRÍTICO DE MI ENSAYO. PAX TIBI IN HONOREM AMICITIAE NOSTRAE.
DIEGO DEMETRIO
DOMINICA IN SEXAGESIMA IN ANNO SALUTIS NOSTRAE MMXXIII
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He leído su artículo lleno de verdad, y sí, me he sentido mal
por la ingratitud de nefastas personas que han destilado odio. Lo del cura
Cordero, conocido así, no es para menos, pero tampoco esa actitud tomada por
esas personas.
Pilar Zavala
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Acabo de leer la vida de este cura. La historia está llena de
este tipo de personajes; podrán borrar su nombre, pero no lo que hizo, para
bien o para mal.
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YA DÉJENLO DESCANSAR EN PAZ. HIZO TANTO POR CUENCA DANDO
ESPACIOS PARA ESTUDIOS, BECAS PARA NIÑOS NECESITADOS. VEAMOS LO BUENO TAMBIÉN Y
NO SOLO LO MALO. QUÉ PENA.
DILECTISSIMA Gioconda Barahona: Exactamente... Hizo tanto por Cuenca y era además un exalumno del querido colegio Borja y uno de los más febricitantes amantes de la Mater Dolorosa, pero sus crímenes, desgraciadamente, opacan sus cosas buenas. Requiescat in pace ad vitam aeternam in nomine Christi, pater César Cordero Moscoso omnes clamamus sicut antiqui Societatis Iesu alumni in conchense collegium «Rafael Borja».
Diego Demetrio
Octava Dominica in septuagesima in Anno Salutis Nostrae MMXXIII
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Acotar que dentro de la comunidad universitaria católica aún quedan personas que consideran a César Cordero como un ilustre y desestiman las denuncias de pederastia, el día de su muerte y al siguiente, la Basílica de la Santísima Trinidad, estuvo con la fachada a obscuras, supongo en señal de duelo.
Davicho Quintuña Rodriguez
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SI ESO HA PASADO ESTÁ PERFECTO... NO POR LA PEDERASTIA EL
CURA DEBE SER CASTIGADO CON NO TENER HONRAS FÚNEBRES O DUELO EN SU BASÍLICA DE
LA SANTÍSIMA TRINIDAD. TENEMOS EN LA SANTA MADRE IGLESIA CATÓLICA, APOSTÓLICA Y
ROMANA EL MANDAMIENTO DE ENTERRAR Y DAR CRISTIANA SEPULTURA A LOS MUERTOS, ASÍ SEAN
PEDERASTAS O CRIMINALES ASESINOS O CRIMINALES GENOCIDAS O LO QUE FUEREN. PERO
LA INGRATITUD DE LA UNIVERSIDAD CATÓLICA ES LO PEOR DE LO PEOR Y LA INGRATITUD
DEL FEMENTIDO OBISPO DE AZOGUES Y DE ENRIQUE POZO CABRERA RAYAN YA EN LA VILEZA
MÁS ATROZ QUE PUDO EXPERIMENTAR EL CURA PEDERASTA IN URBE NOSTRA.
DIEGO DEMETRIO
OCTAVA DOMINICA IN SEXAGESIMA, AD MMXXIII
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Gracias por informarnos con tanta claridad y sin apegos sobre
la vida y obra de un personaje que, al parecer, se creía divino, rodeado de
esbirros que inflaban su ego con actos y palabras vacías. La vanidad es o era
una de las características de quienes rodeaban a este personaje; claro, con
contadas excepciones. Y pensar que quienes no le rendimos pleitesía fuimos
merecedores de calumnias y hasta desprecio. El tiempo hizo su trabajo. El poder
y la religión no deben ser escudos, sino armas contra lo inmoral e injusto.
Digna Cayancela
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Para Enrique Pozo le cae como anillo al dedo ese refrán que dice así: Cría cuervos y te sacarán los ojos.
Julio Auqui
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TAL CUAL DÍCELO USTED, Julio Auqui... ESE ES JUSTAMENTE EL REFRÁN QUE MERECE ENRIQUE POZO CABRERA, QUIEN
HA VALIDO MÁS POR SUS COMPLEJOS QUE POR SUS MÉRITOS, QUE TAMPOCO LOS TIENE
PORQUE BIEN ESTULTO Y ESTÓLIDO ES. POR ESO MISMO TERMINA EN EL RIDÍCULO
HACIÉNDOSE UN MONUMENTO QUE ES EL HAZME REÍR DE TODO AZOGUES SUPER FLUMINA
BURGAY. TAL COMO DICE USTED, POZO HA SIDO UN VERDADERO CUERVO PARA EL CURA
CORDERO Y SU TRISTE Y DESGRACIADO FINAL IN URBE NOSTRA.
DIEGO DEMETRIO
OCTAVA DOMINICA IN QUINCUAGESIMA, AD MMXXIII
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Me quedé atónita. Aunque en la emisora radial Pichincha
Universal escuché con desesperación al agraviado, en el 2018. Se hizo justicia,
aunque tarde, y jamás se reparará el daño físico y mental de Jorge Palacios y
otros niños y jóvenes, por el autoritarismo y vanidad de Cordero.
Giselle Dueñas
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LA TRISTE Y DESGRACIADA MUERTE DEL CURA CORDERO EN CUENCA ES COMO LA MUERTE DE UNA MASCOTA CANINA:
DIEGO DEMETRIO
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No insultar ni desdeñar a tan nobles animales; la muerte de
ellos es un dolor para los que les amamos y ellos dan un amor incondicional:
Gabriel Tenorio Salazar
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Cuenca Comunica
Ha
fallecido el ex - sacerdote César Augusto Cordero Moscoso, a quien le llamaban
el «Cura Cordero». Era investigado por agresiones sexuales a menores de edad.
En el año 2018 el Vaticano lo sancionó y dispuso separarlo como religioso.
Fuente: Cristian Sánchez
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Gracias por su aporte a la comunidad. La institución de la Universidad Católica de Cuenca.
Martha Vintimilla
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Por fin… Con razón está un clima
hermoso.
Jacobo Lucero
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Por fin ha fallecido… Ya era hora ya
tiene que estar al lado se satanás
Pablo Palacios Barrera
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Réquiem por un ser polémico
Julio Cabrera Crespo
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Por fin buenas noticias. Vamos empezando
bien estos carnavales.
Edu Alvarez Moya
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No
debería ser hecho una noticia… Una persona así no merece que nadie le recuerde.
Si no se ha arrepentido de todo lo que ha hecho, en estos momentos estará dando
cuentas a Dios para la vida eterna y condenación eterna.
Valeria Samaniego
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Dios lo tenga en su gloria
Francisco Coello
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Correcto
amigo, Francisco Coello,
cada uno labra su destino... Y este personaje labró su camino directo a
cualquier lado, menos al cielo o a Dios, si es que existe. Así de simple. Un
abrazo de respeto mi buen amigo.
Que de
Dios goce: que allá reciba el premio merecido por su misión y el legado que
deja en la sociedad: una obra educativa que ha traspasado fronteras. ¿Cuántos
profesionales que desde allí hemos triunfado obteniendo la subsistencia para
nuestras familias. Estoy segura que Dios Padre, con su infinita misericordia y
bondad, ya perdonó sus errores que como todo humano pudo cometer. Gracias al
Padre César Cordero. Descanse en paz.
Lib Patty Torres
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No, cojuda, abusar de niños no es un
error. Es un crimen.
Carlos Toledo Duque
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¿Dios ya
lo haya perdonado? No todos los humanos son violadores… Lamentablemente dejó
secuelas a quienes abusó.
Pilar Pilar
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Mary Alvarez Pinos
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Señora Lib Patty Torres: Qué tristeza me das.
Monica Muñoz
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Señora Monica Muñoz: Sana tu corazón.
Lib Patty Torres
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Señora Lib Patty Torres: Tú cambia tu cerebro.
Él fue un pedófilo. Lastimó a niños
Monica Muñoz
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Pobres
de nuestras almas, pobres de nosotros que juzgamos a los demás por sus pecados.
¿Qué pecados tendremos y cual será nuestro premio? ¿O no será que por nuestros
pecados tendremos una agonía lenta? Como ejemplo tengamos las agonías de muchos
que al final ni un grito de perdón pueden dar... Alma de Cristo, a la hora
de su llegada acógerlo y llévalo contigo, no te olvides de nosotros pecadores.
AMÉN.
Eulalia Suquilanda
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¿Cuál fue la traición amigo? Lo que sí sé es que este grupo
se adueñó de la Universidad Católica de Cuenca. Todos se olvidan de que César
Cordero Moscoso fue un hombre visionario y que educó a miles de personas y dejó
un legado que se están llevando los laureles otros que no han puesto un
centavo. ¿Qué podemos hacer? Hay regentes como el Dr Hugo Darquea. Es un hombre
sincero, honrado. Podemos hablar con él.
Jose Joaquin
Moscoso
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Me
recuerda su mirada, a la de un buen seminarista
Manuel Bustos.
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Y REALMENTE FUE UN BUEN SEMINARISTA Y UN BRILLANTE ALUMNO DE NUESTROS
BENEMÉRITOS PADRES JESUITAS Y UN GRAN EDUCADOR QUE GESTÓ UNA COMUNIDAD
EDUCATIVA CATÓLICA DE GRAN ENVERGADURA IN URBE NOSTRA, MÁS ALLÁ DE QUE HAYA
SIDO UN PEDERASTA. POR ESO ES QUE LA INGRATITUD POR SUS OBRAS BUENAS ES INFAME
SÓLO POR LA DESGRACIA DE SUS CRÍMENES COMETIDOS EN LA PEDOFILIA IN NOSTRA
SANCTA MATER ECCLESIA. REQUIESCAT IN PACE AD VITAM AETERNAM IN NOMINE DOMINI
PATER CESAR CORDERO MOSCOSO.
DIEGO
DEMETRIO
OCTAVA
DOMINICA IN SEXAGESIMA IN ANNO SALUTIS NOSTRAE MMXXIII.
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Fue un despreciable pederasta que se ha ido impune y sin pagar
por sus execrables crímenes. Debe ser borrado sin miramientos cualquier vestigio
de esa escoria e incautados todos los bienes que pasó a manos de testaferros.
Incluido esa inmundicia de centro donde se compran títulos universitarios.
Diego Delgado
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La razón no pide fuerza. Desde que se conoce de que el ser
humano debe ser culto y debe desarrollarse en sociedad; se entiende que se
deben seguir reglas; luego, quien piensa que puede hacer caso omiso a un
ordenamiento jurídico o a un sistema social, lamentablemente puede ser todo,
menos racional. Pero mis criterios se basan en afirmaciones válidas
Luis Flores
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Pensaba escribir o responder algo visceral y me tomé la
molestia de revisar su perfil. Observo que estudió en la Universidad Católica y
que debe tener seguramente sus razones y debe guardar un recuerdo positivo del
finado sacerdote como para sugerir que la culpabilidad de un criminal únicamente
la determina el debido proceso. Su opinión será válida para su universo y su
vivencia personal, no representa a nadie más que usted y mal han hecho (no
usted) en nombrar a la fuerza a la comunidad jesuita para intentar sensibilizar
a los lectores intentando perfumar lo que apesta. No se preocupen y no sufran
porque Dios recibirá a cada uno como éste se merezca y seguramente un humilde y
entregado siervo de Dios no depende de homenajes ni requiere ceremonias pomposas
para llegar con honor al encuentro del creador.
Paul López
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Distinguido Paúl: qué bien que lo haga y no tengo problema
que sea público. Si revisa el mensaje yo no he hecho relación ni he incluido a
la comunidad jesuita. Mis comentarios son únicamente jurídicos, situación que lo
puedo debatir en cualquier plano. Más bien el mensaje principal de esta
publicación que no es mía, es al que seguramente usted se refiere. Encarezco lo
revise y aclare de ser posible su comentario. En lo demás es cierto, nadie
necesita homenajes para encontrar la verdad ante el creador.
Luis Flores
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¿O sea que ud es muy racional?. Y sus afirmaciones no las hace.
Y pone en un pedestal a un PEDÓFILO.
Jorge J
Castro Perez
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La racionalidad, señor Castro, desde mi punto de vista está
en analizar un problema jurídico y no mediático de quien pretende declarar
culpabilidad sin debido proceso. Nada más.
Luis Flores
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La sociedad debe olvidar a ese sujeto...no tiene perdón quien
hizo daño a niños y los marcó para toda su vida con un trauma imborrable. ¡Y qué
daño le causó a la misma Iglesia Católica!
Jaime Antonio
Cuesta Vásconez
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El nombre de esta lacra debe estar en una placa en el parque
Calderón, como escarmiento para la hipócrita sociedad de esta ciudad!
Jos Chavez
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Cómo puede pedir misa para un sacerdote que abusó de tantos
niños y dañó de la peor manera posible la imagen de la Iglesia Católica. Una
catarsis sería olvidarse para siempre de este hombre que avergüenza a Cuenca.
Isabel Lloret
Orellana
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Olvidar a este individuo ya constituye un acto de piedad cristiana
Juan Sotomayor
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Borrar de la memoria colectiva las atrocidades cometidas por este
desviado y degenerado es un error; es necesario un precedente muy presente,
para que sirva de escarmiento!
Jos Chavez
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Un violador no merece perdón… Merece todo el castigo infernal.
Jose Luis
Iglesias Calderon
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AD LECTOREM:
ES PERTINENTE HACER UN PUNTO DE ORDEN, HIC ET NUNC, IN
HONOREM VERITATIS:
SOMOS EX ALUMNOS JESUITAS DEL QUERIDO COLEGIO BORJA Y SOMOS CATÓLICOS, APOSTÓLICOS Y ROMANOS Y HEMOS APRENDIDO QUE LA SANTA MADRE IGLESIA NOS ENSEÑA EN LAS OBRAS DE MISERICORDIA A ENTERRAR A LOS MUERTOS Y HASTA LAS ALMAS MÁS PECADORAS TIENEN DERECHO A UNA MISA DE RÉQUIEM PERO LA SOCIEDAD CUENCANA HA NEGÁDOLE HASTA ESE DERECHO AL CURA CORDERO, QUIEN ES REALMENTE UNA ALMA EN PENA IN VITA CIVITATIS O EN LA VIDA DE LA CIUDAD. JUSTAMENTE PORQUE FUE UN PEDERASTA SU ALMA REQUIERE DESCANSAR EN PAZ CON UNA MISA DE RÉQUIEM PERO LA MALDAD Y LA INGRATITUD DE LA MORLAQUÍA ES DIGNA DE CENSURA IN NOMINE CHRISTI. AL MENOS, DESDE AQUÍ OREMUS PRO EO: REQUIESCAT IN PACE AD VITAM AETERNAM IN NOMINE DOMINI PATER CÉSAR CORDERO MOSCOSO, EX SACERDOS IN SANCTA ROMANA ECCLESIA ET ANTIQUS ALUMNUS SOCIETATIS IESU IN CONCHENSE COLLEGIUM RAFAEL BORJA. ÉL ERA ADEMÁS NUESTRO COMPAÑERO EX ALUMNO DE LA V PROMOCIÓN DEL BORJA AUNQUE NOS DUELA DE PROFUNDIS IN VITA CIVITATIS Y ¿DÓNDE ESTÁ NUESTRA CARIDAD CRISTIANA AB INTRA SOCIETATIS IESU?
OMNIA AD MAIOREM DEI GLORIAM IN CONCHENSE COLLEGIUM RAFAEL
BORJA
II DOMINICA IN QUADRAGESIMA IN ANNO SALUTIS NOSTRAE MMXXIII.
NO LLEGO A ENTENDER EL ¿POR QUÉ SUS PALABRAS EN LATIN? ES LAMENTABLE QUE TODAS LAS RELIGIONES LAS HAN CREADO CON EL ÚNICO FIN DE ESCLAVITUD A LA SOCIEDAD. ELLOS TRAJERON SU RELIGIÓN MIENTRAS ROBABAN NUESTRAS RIQUEZAS. EN CUANTO AL «SACERDOTE» AL CUAL EN VIDA LE DEBIERON QUITAR ESE NOMBRAMIENTO PUEDEN HACER LO QUE EN BIEN PUEDAN: DAR HOMENAJES, ETCÉTERA... LO QUE NOS DEBE QUEDAR CLARO ES QUE NO SE DEBEN BORRAR DE NUESTRA CONCIENCIA COLECTIVA LAS ATROCIDADES HECHAS POR ESE SER HUMANO. SOY CATÓLICA. NO CAMBIARÉ... USTED DENOTA SER UNA PERSONA MUY PREPARADA Y AÚN ASÍ QUIERE IDIOTIZAR A LAS PERSONAS CON LA RELIGIÓN; DEJA MUCHO QUE PENSAR.
Ginna Maribel
Espinoza Vasquez
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PARA SU ENTENDIMIENTO, SEPA USTED QUE LA LINGUA LATINA ES LA
MADRE NUTRICIA DE NUESTRA INCOMPARABLE LENGUA DE CASTILLA Y NO DEBERÍA CAUSARLE
ESPANTO QUE YO VENERE A LA LENGUA MADRE COMO QUIEN RESPETA A SU MADRE. POR OTRO
LADO, SUS OPINIONES FRENTE AL CURA CORDERO SON ANTICRISTIANAS PUES NO ESTAMOS
DEFENDIENDO AL CURA PEDERASTA. SIMPLEMENTE HEMOS DICHO QUE LA SANTA MADRE
IGLESIA NOS ENSEÑA EN LAS OBRAS DE MISERICORDIA A ENTERRAR A LOS MUERTOS Y LA
SOCIEDAD CUENCANA HA NEGÁDOLE HASTA ESE DERECHO AL CURA CORDERO. HASTA LAS
ALMAS MÁS PECADORAS TIENEN DERECHO A UNA MISA DE RÉQUIEM PERO LA MALDAD Y LA
INGRATITUD DE LA MORLAQUÍA ES DIGNA DE CENSURA IN NOMINE CHRISTI. MEJOR OREMUS
PRO EO IN VIA DEI: RÉQUIEM AETERNAM DONA EI DOMINE ET LUX PERPETUA LUCEAT EI.
REQUIESCAT IN PACE AD VITAM AETERNAM IN NOMINE DOMINI PATER CÉSAR CORDERO
MOSCOSO, EX SACERDOS IN SANCTA ROMANA ECCLESIA ET ANTIQUS ALUMNUS SOCIETATIS
IESU IN CONCHENSE COLLEGIUM RAFAEL BORJA. PAX TIBI IN VIA AMICITIAE SEMPER
AMABILIS. OMNIA AD MAIOREM DEI GLORIAM.
DIEGO DEMETRIO
OCTAVA II DOMINICA IN QUADRAGESIMA, AD MMXXIII
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NADIE SE PODRÍA ESPANTAR POR SUS CONOCIMIENTOS, QUE TENGA UNA
EXCELENTE TARDE.
Ginna Maribel
Espinoza Vasquez
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La gente nunca reconoce los valores castiga cruelmente los
errores.
Kiko Yolanda
Usubillaga
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Puro teatro para acabar con las unidades educativas y hacerse
con la universidad, ahora los propietarios de la universidad CATÓLICA ya viven
como reyes, solo DIOS los juzgará. el daño ya está hecho.
George W Asitimbay
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Formidable reportaje para meditar y pensar en muchas cosas sobre el cura Cordero que pudo ser un diablo pero ha tenido cosas bacanas: su amor por la virgencita de los Dolores por ejemplo. No sabía que el santuario de la Lolita en Azogues ha sido porque el cura era un amante de la Dolorosa. Qué turro lo de la ingratitud de Enrique Pozo. Y qué bruto el man para mandarse a hacer un monumento y una placa diciendo que es sangre azul... Qué sangre azul va a ser si por Cabrera se pierde toda la crema y nata han de decir los que sí son racistas. Por eso mismo ha de ser que es horrible porque es un man fierito, bien feito o feazo... nada simpático... Cómo también se enamoraría la mujer de un mancito que la plena que es feo aunque hecho el crazy para mandarse esa placa del ridículo en Azogues. Y todavía derribando al cura, del que ha sido hasta traidor... uff... qué notas.... No he visto pero ya me voy a dar un curvo para reírme bonito. Y lo mejor de todo está en la respuesta del periodista Tello ante el reportaje diciendo que el historiador le tiene envidia... jajaja... y total el historiador le demuestra que todo lo que escribe es con fechas mal puestas y con errores de cálculo... jajaja... cómo tener envidia de un viejo asnorante que igualito al Pozo se cree la ultima coca cola del diesierto en el periodismo... jejejeje.... Me he reído como nunca también por estas notas... A lo mero mero. Por eso, dejaré escribiendo estito por aquí y me esfumo como el humo al estilo cura Cordero....
ResponderEliminarojalá Diosito le haya perdonado a este cura que no es que ha cometido errores sino que era un enfermo que jodió la vida de tantos niños... Por más que sea devoto de la Dolorosa o todo lo que se dice en este reportaje lo que hizo es imperdonable...
ResponderEliminarPrimera vez que le sacan la madre al Pozo de la Cato, como ahora le dicen a la universidad del cura Cordero, por ese monumento y esa placa que de veritas nunca me he fijado... jaja... el ridículo completo para el Pozo hacerse ese homenaje en vida él mismito, sin que nadie le reconozca méritos ni talentos y más todavía suplantando al cura Cordero al que no ha sabido ser un pana sincero. Bien dijo mi abuelita: hijito, lo peor es ser mal agradecido. Y de verdad los ingratos son horribles en este mundo traidor donde todo es traición...
ResponderEliminarUna historia de una vida borrascosas, pero la historia está llena de este tipo de personajes , podrán borrar su nombre , pero no lo que iso para bien o para mal.
ResponderEliminarSin palabras Dr. Orellana, su artículo dice la verdad de ayer y de hoy sobre nuestra vida comarca a y de sus principales actores.
ResponderEliminarHa muerto un criminal pederasta, lamentablemente la justicia ha tardado convirtiéndose en injusticia al no haber metido en prisión a este despreciable infrahumano.
ResponderEliminarUps. Terrible... I am living in Cuenca but I didn't know this very ugly story. I am surprised of this priest in the Catholic church.
ResponderEliminarEstimado Diego, me parece ha realizado un magistral artículo, en donde ha detallado de forma objetiva la vida de este personaje, que no es indiferente a ningún cuencano, queda a criterio de cada uno los juicios que pueda emitir.
ResponderEliminarya basta de tomarle en cuenta a este miserable pues si existe el infierno seria poco para este canalla y sus seguidores. GAS
ResponderEliminarHay de todo en este artículo... es como una radiografìa de la verdad con el cura Cordero. Usted ha mostrado como en un espejo todito lo que está pasando, historiador Orellana. Hasta el obispo de Azogues ha sido un traidor con el pobre cura Cordero. No sabía que ha sabido ir arrastrándose atrás del cura Cordero... como los reptiles... o las ratas hediondas que se trepan hasta por las paredes... Y ni una misita de honras por el cura Cordero ha dado este pollerudo que logra el obispado por palanqueos de vómito. Qué tal...
ResponderEliminarEste artículo topa temas que nadie se ha atrevido a tocar cantando las claras y puras verdades, hablando a la morocha dice las cosas a la plena, clarito y directo. Pero lo que queda màs claro que el agua es la INGRATITUD de Cuenca y de ciertos personajes como Enrique Pozo, el rector de la Cato, el obispo Vintimilla de Azogues y la propia UNIVERSIDAD CATÓLICA al cura Cordero, a quien por poco le deben la vida pero le adeudan la fama hasta cuando estiren la pata. El cura Cordero pudo ser el criminal más asqueroso pero deja cosas buenas que estos personajes nunca hubieran podido fundar. Y por eso mismo es una ingratitud que no se merece este cura criminal.
ResponderEliminarqué feo para este cura ser nieto del presidente Cordero y haber muerto como el perro. sin el llanto de sus cepillos que mejor le dan la espalda, ni le agradecen y mejor, de una, se han mandado a hacer estatuas para suplantar al pobre cura, como el Pozo de la Cato, seguramente queriendo impresionar a los azhucos. Lo que se ve en este mundo tan loco y podrido... mamma mía.
ResponderEliminarCesar Cordero es uno de los miles de sacerdotes a nivel de todo el mundo que han incurrido en tantos crímenes entre esos violaciones ..Mercaderes de la Fe es la palabra correcta ..todo el estamento Religioso que llega hasta las " Grandes Directrices de la religion Catolica que el Vaticano" Casi todos ellos llenos de delitos, muchos de ellos sin Castigo. Por qué siguen teniendo poder .
ResponderEliminarComo desearía que éste artículo leyeran mis pupilos, sacaríamos bastante temas para análisis como por ejemplo: la ingratitud, la falta de valores, la argumentación, personificación de cada personaje... Hermoso escrito, más allá de lo real...
ResponderEliminarNo quiero parecer defensor de César Cordero Moscoso, pero aún el más ruín pecador en este mundo tiene la oportunidad de arrepentirse. No sabemos si éste lo hizo en su último momento. De todas maneras citaré las palabras del único verdadero Santo, "el que esté libre de pecado arroje la primera piedra"
ResponderEliminarNunca me había puesto a pensar en las cosas buenas que tiene el cura Cordero y este artículo me hizo reflexionar que el cura es un ilustre deslustrado por la pederastia pero la ingratitud de los esbirros es lo peor de lo peor. Ese Pozo, de la Cato, con el ridículo de hacerse él mismo un monumento. Ese cholo alzado del obispo de Azogues que ha sido obispo solo por lamer el culo del cura pederasta. ¿No sería otro amante del cura y el cura para que no le denuncie que le violó le hizo nombrar obispo? toditas estas cosas he pensado gracias a este inteligente artículo... jejej
ResponderEliminarFelicitaciones al doctor Orellana. Se pasó con este artículo que hace ver la otra cara de la medalla con el caso del cura Cordero y hace pensar en las conductas de otros personajes que le deben la fama al cura Cordero y que no le tuvieron gratitud. Eso es lo más turro de la nota, sobre todo con el rector de la Cato, Pozo. Y con el obispo de Azogues. Qué brutalidad la de estos manes frente al cura Cordero, el uno con una placa donde dice ser gamonal como si eso fuera lo máximo, el otro pollerudo le debe el obispado al cura Cordero y ni siquiera un responso por su muerte.
ResponderEliminarEl cura Cordero no merece ningún homenaje porque lo que hizo a los niños es imperdonable... pero creo que es más imperdonable que quienes debían agradecerle por lo que son se hayan callado, como el rector de la Católica, el doctor Enrique Pozo Cabrera y el monseñor de Azogues. Oritas entiendo por qué llegó a ser obispo... por ser sirviente del cura pedófilo.. No hay cosa que no se sepa en esta vida.
ResponderEliminardar en el clavo se llama cuando se habla con tanta crudeza... y este artículo da en el clavo sobre muchas cosas y muchos personajes de nuestra sociedad... Todo el mundo ha lanzado piedras contra el cura Cordero en su muerte pero leyendo esto vemos que otros son los que deben ser apedreados: el rector de la Católica, el obispo de Azogues, el rector del Borja... Me espantó lo del cuadro de la Dolorosa... pero también me hizo reír... qué estúpido ese cura para haber engañado a Cuenca con un cuadro que no era el cuadro del milagro de la Dolorosa y solo por el escándalo del cura Cordero... Gente bruta... son los brutos los que llegan a esos cargos...
ResponderEliminarYa me doy una vuelta por la cato de Azogues... Esto del monumento de Pozo no me lo puedo perder... si no fuera por las fotos del artículo no quisiera creer que esto sea cierto... ja ja... lo que hace la vanidad...
ResponderEliminarEste cura es el mismo demonio pero ciertito y de a veritas que ha hecho cosas buenas... este escrito me parece bacán pues muestra las cosas más allá de la verdad y hace pensar no solo en el cura Cordero sino en la gente que lo rodea... Por eso no cualquiera que está al lado de uno es amigo de verdad... Y estos personajes no eran amigos del cura, lo estaban utilizando... qué triste la vida en este mundo cruel.
ResponderEliminarFelicitaciones al historiador Demetrio Orellana. Este artículo es la prueba de su sapiencia... Qué manera de usar el idioma para explicar unas verdades que nuestros paisanos no quieren ver con el caso cura Cordero... me encantó a lo bien...
ResponderEliminarNavegando en la internet uno se encuentra con cosas extraordinarias... qué hermoso escrito sobre el cura Cordero que debe ser siempre despreciado pero que sus obras no pueden ser tachadas, borradas, eliminadas como si mandamos a la basura... y qué cosas hay que pensar con algunas personas como el rector de la Universidad del cura Cordero o el propio monseñor Vintimilla. Sí se oía en Azogues que este obispo llegó acá con palanqueos pero no sabía que eran las palancas del cura Cordero. que shunsha que soy a veces para no ponerme las pilas en la vida pero este escrito me puso pilas....
ResponderEliminarLo de Pozo es impresentable!!! Fue un esbirro fiel, el faldero más fiel y por ello le encargaron el rectorado; luego, en un proceso tramposo orquestado por el mismo con su mafia de truanes disfrazados de honorables, se instauró de facto nuevamente en el rectorado… su escultura, al igual que sus disque grados académicos, son un acervo a su estupidez, mediocridad y megalomania; no dejan de ser ridículos!!!
ResponderEliminarterrible lo que le han hecho al Padre César, él fue un Hombre digno y todo lo que orquestaron para desprestigiarlo de los supuestos abusos es falso , y todo el honor y gloria se han llevado los esbirros desgraciados pero lo pagarán caro
ResponderEliminarMe parece asqueroso que el cura haya sido un pedófilo pero sí es triste ver que murió como un perro. Y hasta el perro tiene mejor suerte pues tiene quien lo llore. qué turro... El cura no tuvo quién derrame una lagrimita ni siquiera de sus esbirros... Pero lo más asqueroso es el monumento de Enrique Pozo y el nombramiento del opispo de Azogues conseguido por utilizarle al cura pederasta Cordero por dos sujetos atorrantes: Pozo es oritas un nuevo cura Cordero en la Cato hasta con monumento y placa... jajaja... y el obispillo de Azogues es un cura acomplejado que a cada paso que da deja un tufo de rechazo y hediondez... jajajaja.... Ninguno de los dos ni siquiera una misita por el curita al que tanto le cepillaban para sentarse en su sofá, ocupar su escritorio y venir a Azogues como obispo.
ResponderEliminarPobres corderos
ResponderEliminarWow! Es triste lo que ga pasado a las víctimas y al victimario.Dios los ayude a seguir adelante. Pero publicar con tanta exageración wow! El recibió su karma. Y ustedes no recibirán lo mismo por su exageración? No le defiendo niño acusó. SoloDios lo hace. DIOSesjusto juez. Y eso pasa a los católicos por creer enla gente y no en Dios. No te agarres de la desgracia de los demás. Es triste.
ResponderEliminarConsidero que el olvido es el mejor reconocimiento para infernal ser. Las "buenas obras" son en la actualidad tan sólo un sistema de recolección de dinero para personas que pueden costear estudios tan caros y no benefician a las personas pobres o humildes de la región. Debo felicitar el enfoque dado en la investigación. Saludos
ResponderEliminarFelicitaciones por este bello artículo que hace ponernos las pilas ante un escándalo que nadie puede ocultar con este cura diabólico que sí ha hecho también cosas buenas... Lo más bacano de lo que leí es cómo caen junto con el cura otros personajes mal agradecidos como Enrique Pozo... qué bestia que un esbirro y lame culos del cura termine haciéndose un monumento a la estupidez... y el obispo de Azogues... quién diría que ese pollerudo ha sido obispo solo por andar atrás de las faldas del cura Cordero... qué asco de gente en mi bella ciudad de Azogues...
ResponderEliminarLo que hizo con las manos lo borró con el codo, pudo haber sido homenajeado por lo alto, lastimosamente sus crímenes cometidos lo dejaron en el olvido y con un merecido desceso. Después de todo parece ser que si hubo justicia divina.
ResponderEliminarEl cura Cordero nunca ha sido de mi simpatía pero este artículo me hizo reflexionar que sus obras buenas han sido para la cosecha de sapos vivos y oportunistas como Enrique Pozo Cabrera...
ResponderEliminarqué ridiculez lo del monumento del Pozo... y qué estupidez lo de la placa que dice que es sangre azul... jejeje no creí que era tan bruto esa bestia.
ResponderEliminarFelicitaciones por este hermoso artículo en donde es espectacular cómo describe la realidad del cura Cordero, sin fanatismos ni extremismos, para que los lectores vean la verdad... Y qué espectacular la manerita con la cual este historiador Demetrio Orellana logra con su pluma derrumbar "literalmente" el monumento del Pozo con su finura para joderles a los imbéciles... y qué finura para hacer lo propio con el obispo de Azogues que queda no solo como bestia sino como ignorante por lo de las lámparas que dizqué ha sabido apreciar el cura Cordero... Y lo del palanqueo del obispado ya es lo máximo contra este obispillo de Azogues... jajaja
ResponderEliminarmaravilla de art{iculo que muestra la luz y la sombra de la vida del cura Cordero y el incendio que causa su desaparición con las personas que abusaron de él para hoy ser sus sucesores en la Cato. De verdad es ingrato que la Cato no reconozca que el cura murió para rendir homenaje por ser el fundador.
ResponderEliminarEl cura Cordero no merece perdón y olvido. Aquí sí cabe decir como la loca del ático, Ratael Correa: PROHIBIDO OLVIDAR... y PROHIBIDO RECORDAR AL CURA CORDERO... Pero el artículo se pasó... hace pensar en cosas chéveres de las gentes que eran chupamedias del cura, con sus bajas pasiones y falsas lealtades para el cura pederasta del que solo se aprovechaban...
ResponderEliminarquién hubiera pensado que el cura Cordero perdería su majestad... tan orgullloso como fue... este artículo es lo máximo para mostrarnos el lado oscuro de las cosas con el cura y sus secuaces... jeje
ResponderEliminarEste miserable que hizo daño, no sabremos nunca a cuántas personas mismo... y a cuántas familias merece el olvido, pues muchas víctimas se callaron por la vergüenza... Todo lo que inició está marcado por la explotación a los profesores más incumplimiento. Además, era racista y clasista, siempre creyendo en que era Cordero...
ResponderEliminarSi la doctora Palacios, hermana de Jaime Palacios, el huambra violado por el cura, no se plantaba como se plantó nunca iba a caer el cura Cordero de ese altar donde andaba echando pujos... Pero la justicia divina sí hubo aquí en este caso...
ResponderEliminarSpectacular article where I have practised my spanish because the style of the author is marvelous in spanish language... Otherwise, terrible story and interesting facts about the people around of the cura Cordero in Cuenca. Congratulations, doctor Orellana.
ResponderEliminarInteresantísimo análisis de cosas que nunca he sabido sobre el cura Cordero... Y qué serenidad del autor para hacer que el lector vea la realidad sin dejarse llevar de odios ni pasiones, ni rencores o venganzas... Eso se llama ser un buen historiador... Felicitaciones, abogado Orellana. Mis respetos a usted.
ResponderEliminarVer esa foto del cura Cordero, jovencito, como un santo seminarista da tristeza... En esa sotana y en esa carita se ocultaba un monstruo que hizo tanto daño a los infantes de Cuenca... Pero también se revelaba una inteligencia y una capacidad de hacer cosas que sorprende... Y por eso, el cura Cordero hizo tantas obras, tantas cosas, tantas acciones buenas como educador para que ahora otros se lleven las glorias... Qué asco de ese Pozo, que ha sido infiel con el cura Cordero y que ni siquiera le recuerda como debería en el puesto que heredó... Lindo artículo que hace reflexionar en que el cura Cordero no puede ser olvidado de nadie, aunque todos se propongan....
ResponderEliminarDesgraciada muerte mismo es la del cura Cordero... Era tan preponderante en Cuenca para terminar odiado y olvidado... Eso se llama justicia divina... Pero mala nota que Enrique Pozo se olvide de la memoria de quien le dio de comer y de dormir y de vivir... Qué feazo lo del monumento... Y qué onda con la Cato... no publicar en el facebook que murió su fundador... Eso sí es una cosa turra, turra... El cura no ha sido querido ni por sus lamepatas... solo le usaban... horrible que el obispo de Azogues le haya usado al cura para hacerse obispo... O sea que sin cura Cordero el obispo de Azogues no sería nada... Y que sea ingrato ya es el acabóse...
ResponderEliminarUn polémico asunto que para debatirlo se necesita cabeza fría... El cura Cordero es un delincuente violador.... es la una tesis... El cura Cordero hizo obras interesantes... es la otra tesis.... Con el cura Cordero hay maldad de gente envenenada que no le perdona sus horrores... Con el cura Cordero existe ingratitud de la gente que se le aprovechó y que hasta le sucedió en el cargo.... Todito esto se lee en este artículo para pensarlo mucho... Felicitaciones a Demetrio por la capacidad de ver lo que muchos no quieren ver... y por decirlo tan bien escrito...
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