In historia Dolorosae, a través de nuestros periplos históricos tras las huellas de la Mater Dolorosa, in patria nostra, hemos experimentado, febricitantes de gozo, una dichosa serendipia con el descubrimiento de una partitura musical de un encantador cántico a la Dolorosa del Colegio «San Gabriel», del destacado compositor cuencano Rafael Carpio Abad, con letra de monseñor Miguel Cordero Crespo. La pieza musical llámase «ME BUSCASTE» y su melodía atrae, inflama y encanta, con armoniosos arpegios, despertando sublimes sentimientos hacia la amantissima Mater Dolorosa, vera mater nostra in conchense urbe, apud flumina Tomebamba.
La obra compúsose el 20 de Abril de 1949, hace exactamente 75 años, pero en más de 7 décadas ha quedádose en el cruel olvido por parte de los cuencanos. En la década de 1950 cantábasela con frecuencia en la Catedral Vieja de Cuenca, donde Miguel Cordero Crespo, el autor de la letra, oficiaba permanentemente como canónigo y promovíala para el debido conocimiento de los fieles, mas dejó de cantársela in perpetuum, para empolvarse guardada entre las partituras del autor del famoso cachullapi «La Chola Cuencana», que por inopinada coincidencia fue también compuesto en el mismo año de esta hermosa canción a la Mater Dolorosa.
La razón o el motivo por el cual creóse la plegaria débese a la intensa veneración que Miguel Cordero Crespo tenía por la Dolorosa del Colegio, en filial afecto a la Mater semper dilectissima, pues la letra del cántico es profundamente conceptuosa, versátil, intimista y amorosa, perfectamente concebida con el necesario rigor que la Preceptiva Literaria exige in via pulchritudinis, lo que da cuenta, además, del sui generis talento poético que Miguel Cordero Crespo poseía cuando creaba poemas o plegarias honrando a su ilustre prosapia literaria, pues era hijo de Miguel Cordero Dávila y nieto del presidente Luis Cordero Crespo, mientras que por su maternal filiación igualmente poseía genes literarios, siendo como era hijo de Raquel Crespo Astudillo.
Mas hay un detalle precioso que consignámoslo en estas líneas frente a este mirífico cántico dolorosiano y es el hecho de que Miguel Cordero Crespo había creado la letra en conmemoración del segundo aniversario de la primera visita a Cuenca del cuadro original del prodigio de la Mater Dolorosa. Así es como Rafael Carpio Abad hácelo constar en la empolvada partitura que hémosla descubierto entre sus obras atesoradas con afecto filial por su benemérito hijo Luis Carpio Mogrovejo. La composición musical refleja, por otro lado, que Rafael Carpio Abad era no solo un artista de música popular, como tradicionalmente ha considerádoselo, sino un compositor de grandes virtualidades para crear música sacra, puesto que, ab uno disce omnes, este cántico a la Mater Dolorosa es solamente un ejemplo de sus exquisitas creaciones sacras in Sancta Romana Ecclesia.
Copiamos, ex
integro, el epígrafe de Rafael Carpio Abad que consígnase ad
infra de la original partitura: «CUENCA,
ABRIL 20 DE 1949, SEGUNDO ANIVERSARIO DE LA VISITA QUE HIZO A CUENCA LA SAGRADA
VIRGEN DOLOROSA DEL COLEGIO, EL 27 DE ABRIL DE 1947». Este detalle permítenos columbrar que la
primera estancia de la Dolorosa del Colegio en Cuenca impactó de
profundis in anima viva a Miguel Cordero Crespo, a punto de haberlo
compelido para que en el segundo aniversario del mariano acontecimiento creara
esta espléndida composición literaria, recurriendo a Rafael Carpio Abad para
musicalizarla debidamente, en una genial confluencia de un egregio poeta y un
solvente músico, en evidencia plena de una sincera amistad, puesto que, además,
los dos habían sido compañeros de aula, en la niñez, en la escuela «San José» de los Hermanos de las Escuelas Cristianas,
conociéndose mutuamente como poeta y músico, complicidades únicas que permiten,
in
historia communitatis, la gestación de grandes obras musicales in culturalis
res.
Para la época en que la plegaria musicalizábase habíase ya compuesto el primer himno de Cuenca a la Dolorosa del Colegio, con letra de Manuel María Palacios Bravo y música del padre Carlos Crespi. El himno habíaselo estrenado el 27 de abril de 1947 en la primera visita del cuadro original del prodigio del 20 de Abril de 1906 y aunque la plegaria musical ME BUSCASTE es atractiva, como cántico mariano, es una pena que háyaselo dejado de cantar por los cuencanos, en tanto el primer himno de Cuenca a la Dolorosa ha pervivido más como composición musical de imperecedera memoria en el mundo jesuitico inter nos in communitate nostra.
Léase, ad pedem litterae, la letra del piadoso cántico a la Dolorosa del Colegio, bajo la poética inspiración de Miguel Cordero Crespo in urbe nostra semper admirabilis: «Dolorosa del Colegio/ hermosura hecho dolor/ avergonzado y contrito/ acudo a tu compasión./ Yo soy la lágrima viva/ que de tus ojos cayó/ en las espinas y cardos/ de una ingrata rebelión./ Mas el sol de la ternura/ del abismo me salvó/ y esa lágrima perdida/ retorna a tu corazón./ Me buscaste con tus ojos/ hechos reclamos de amor/ Aquí estoy, dulce María/ Abrázame, tu hijo soy/ tu hijo soy, tu hijo soy/ Abrázame, tu hijo soy».
Gracias a la ejecución musical de la partitura original de Rafael Carpio Abad, por parte del músico azuayo Miguel Orellana Yánez, antiguo profesor del Pensionado «San Francisco de Borja» y último de los maestros de capilla de la iglesia del Santo Cenáculo, ha sido posible rescatar musicalmente este bello cántico in honorem Matris Dolorosae, en nuestro canal de You Tube bajo el siguiente enlace: ME BUSCASTE
En las bodas de diamante
del precioso cántico dolorosiano gratifica confirmar, in via veritatis, que Cuenca,
la «Ciudad Eucarística y Mariana», ha sido un campo fértil para la creación
de hermosas piezas musicales dedicadas por sus hijos a la Dolorosa del Colegio «San Gabriel» durante los 118 años del milagro del 20
de Abril de 1906, como los dos himnos de Cuenca a la Mater Dolorosa. El
primero, del padre Manuel María Palacios Bravo, con música del padre Carlos
Crespi Croci, como ya dijímoslo ut supra. El segundo, de Manuel Coello
Noritz, con música de César Mosquera Merchán. El tercero, el cántico Señora del
Colegio, del padre Antonio Pagán, SJ, ilustre jesuita director del Pensionado «San Francisco de Borja». Hoy, damos publicidad a este bello cántico
de Miguel Cordero Crespo, con música de Rafael Carpio Abad, in
honorem Matris Dolorosae, dulcis virgo Maria, Mater semper veneranda in
splendore magno et singularis, inter nos, sicut antiqui Societatis Iesu alumni
in urbe nostra.
Diego
Demetrio Orellana
Datum
Conchae, iuxta Matris Dolorosae, mensis aprilis, die XX, currentis Anno Domini
MMXXIV
Interesante artículo muy bien escrito del doctor Orellana. Felicitaciones, estimado doctor por haber rescatado la partitura de esta bella canción que nuestro famoso sucho Carpio ha creado para la Dolorosita.
ResponderEliminarINMENSO AGRADECIMIENTO PARA EL DR DIEGO DEMETRIO ORELLANA,
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