In veritatis honorem o En
honor de la verdad salimos nuevamente en defensa de la verdad histórica
frente a unas imperdonables imprecisiones de diario El Mercurio del día de hoy,
13 de abril del año 2024, en relación a la Dolorosa del Colegio, cuyo cuadro
original del milagro del 20 de Abril de 1906 llegará a Cuenca, en su IX VISITA HISTÓRICA, el jueves 18 de
abril, proyectando que la sagrada efigie arribe a la iglesia del Santo Cenáculo,
a las 12:00, para una celebración eucarística in honorem Matris Dolorosae.
Sin embargo, en diario El Mercurio léese una equívoca nota sobre la taumaturga imagen. La autora del yerro es Leonor Peña, comunicadora social de la Curia Arquidiocesana de Cuenca, quien afirma adversum veritatis: «El 20 de abril de 1906 en el colegio San Gabriel de Quito se produjo lo que se ha dado en llamar un prodigio de amor. La Virgen de los Dolores pintada en un cuadro traído de Europa, abría y cerraba los ojos».
En la precedente cita existe un tremebundo yerro pues la verdad histórica frente a la Dolorosa del Colegio es que no trátase de un cuadro pintado y traído desde Europa sino de una cromolitografía o estampa de 52 centímetros de alto, por 40 de ancho, impresa en la casa editorial «TURGIS FILS», PARÍS, 55 Rue St. Placide, desconociéndose, in historia Dolorosae, cuál habrá sido el óleo que sirvió como modelo para su impresión.
La cromolitografía hallábase en una de las paredes del antiguo refectorio del colegio San Gabriel, en donde 35 estudiantes internos cenaban a las 20:00 del día viernes 20 de Abril de 1906, cuando a eso de las 20:15, Carlos Hermann, Jaime Chávez Ramírez y Pedro Donoso, tres de los muchachos internos que hallábanse cerca de la imagen vieron inicialmente que la Virgen de los Dolores parpadeaba por espacio de 15 minutos, prodigio que luego fue contemplado por todo el grupo de 35 niños y dos jesuitas que hallábanse a su cuidado: el padre Andrés Roesch, SJ y el hermano Luis Alberdi, SJ.
Ad interim, otro grave yerro de la nota de diario El Mercurio es del padre Oscar Nárváez, párroco del Santo Cenáculo, quien afirma, adversum veritatis, según la nota de prensa, que «cuando se fundó la parroquia del Santo Cenáculo se declaró a la Virgen Dolorosa como su patrona, por esta razón se ha escogido a esta iglesia para que reciba la imagen de la Dolorosa», lo cual tampoco es cierto puesto que los jesuitas han afirmado que la Dolorosa del Colegio visitará la iglesia del Santo Cenáculo porque este templo fue administrado por los jesuitas hasta 1987, siendo ellos quienes instituyeron la devoción a esta advocación mariana en este templo, por lo que han considerado pertinente que la Mater Dolorosa regrese una vez más a su santuario, como hízolo ya en 1955, durante la II visita histórica del cuadro del prodigio; tanto como en 1977, en la tercera visita; en 1981, por la cuarta visita de la imagen original del milagro; y en el año 2006, en la sexta visita histórica de la taumaturga imagen, en ocasión del centenario del milagro del 20 de Abril de 1906. La Mater Dolorosa nunca llegó al Santo Cenáculo en la I visita histórica del cuadro del prodigio, el 27 de abril de 1947; ni tampoco en la V visita histórica del cuadro del milagro, en 1988; ni en la VII visita histórica del cuadro del portento, en el año 2012, por las Bodas de Diamante del querido colegio Borja; como tampoco en el año 2018, en la VIII visita histórica del cuadro original del milagro, por los 80 años de la fundación del colegio Rafael Borja, cuando acaeció el infame sacrilegio del nefandario cura Rolando Calle en contra de la Dolorosa, al hacer desfilar en Cuenca un cuadro falseta de la Mater Dolorosa sine respectum et reverentia pro ea.
Debería haber más rigurosidad científica y metodológica en las notas que escríbense en El Mercurio acerca de la Mater Dolorosa, pues este tipo de gazapos malinforman y desinforman a la ciudadanía haciendo que la verdad histórica sobre la taumaturga imagen empáñese a fuer de la negligencia y la ausencia de acuciosidad para decir las cosas in via veritatis et in honorem Matris Dolorosae, Virgo prudentissima et Mater semper veneranda in conchense urbe, ad maiorem beatae virginis Honorem.
Diego Demetrio Orellana
Datum Conchae, mensis aprilis, die XIII, reparata salute Anno Dominicae
Incarnationis MMXXIV, octava II Dominica Paschalis
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