lunes, 14 de febrero de 2022

LA AMISTAD Y LA HIPOCRESÍA IN COMMUNITATE NOSTRA

In via claritatis, la plataforma en la que crece la verdadera amistad confórmase del respeto y la confianza y si socávanse de profundis todo acábase en un estrepitoso final al que desembócase con el ominoso fardo de los abusos, los agravios y las perfidias destruyendo implosivamente la inherente «collegialitas affectiva» o «colegialidad afectiva» de una fraternal relación. Así pues, en el instante en que los ultrajes devienen aviesamente avasalladores una amistad que devélase falsaria concluye ipso facto con la desazón que implica la pérdida de lo intangible.

Entre las causas por las que la amistad destrúyese está la hipocresía y fiero es detectarla en personajes a los que apréciase in via sinceritatis. Descúbrense así a las falsas amistades que develando su falsía aseméjanse a las montañas que desmorónanse, los edificios que desplómanse o las preciosas joyas que resultaron bambalina. Si el sentimiento que túvose fue auténtico incómodo será haberse equivocado. En tal diagnosis es nugatorio descubrir a los hipócritas, pues lo más triste de la traición es que nunca proviene de un detractor o un artero enemigo sino de los amigos que traicionan como si recibiérase ex abrupto una puñalada por la espalda. Ergo, la felonía es lo más impúdico de los falsos amigos in vita societatis.


Aunque muchos ni percíbanlo, un nimio acto o sutil gesto envuelve una gigantesca verdad cuando analizámosla con perspicuidad. Cuántas veces la forma de mirar de un prójimo descúbrenos su falsía y deslealtad. Las miradas torvas de los fementidos amigos y falsarias amigas, su vergüenza para exhibir a quienes míranlos como incondicionales, la falta de entereza para defender a una amistad ante quienes censúranlos por llevarse con tal mengano o fulano, el amor por interés, las murmuraciones que trasuntan cosas entredichas en infames cotilleos para no hablar frontalmente o mentir con cinismo y las indirectas de tales gentes desnúdanlas como insinceras y desleales evidenciándonos in extremis los reales sentimientos con sus amistades, amén de que los artificiosos ademanes o gesticulaciones, la forma de contestar un mensaje o una llamada o el hecho de no contestar o hacerse de negar por interpuestas personas son palmarios indicios de las gráciles maneras en las que infiérese la falsía con la que los seres humanos actúan entre amigos in vita mundi.

Si la hipocresía es el caldo de cultivo de una falsa amistad ocúltanse pro tempore los verdaderos sentimientos de una persona para con otra. Así, todo descúbrese un día y el falso amigo o adventicio y enmascarado fariseo cáese fortuitamente develando su vera effigies de taimado y zaino ser, tal como el incandescente fuego que, sub specie instantis, hace erupcionar a los volcanes. Clarifícase así la vera imagen que mantúvose oculta y «allí es cuando que la puerca tuerce el rabo» pues prodúcese un balance consolidado de cuentas en los espúreos amigos o amigas que ya sin veladuras ni maquillajes míranse como abominables zascandiles o traidores.

Y en este punto la mentira atraviesa la relación como el «ánima mundi» o «alma del mundo» por la que créase un escenario donde todo es endeble, enteco e inseguro. Nada fortifícase si los amigos son mendaces y la mentira es el pan de todos sus días, nada solidifícase si las engañifas son los artilugios de estos inicuos seres expertos en la farsa, la falacia y las patrañas. Ad exemplum: adular al amigo con hiperbólicas lisonjas y zalamerías que disfrazan el aprecio que no existe, hablar a  las espaldas y negarlo si la felonía exteriorízase in fraganti, perjudicar al amigo en un negocio o hurtar sus pertenencias, violar la palabra que empéñase como si ella no fuese garantía de la dignidad, usurpar al marido de la amiga si las féminas irrespetan a sus pares o robar a la propia mujer de su alter ego si los varones ignoran el valor de la decencia y los superlativos principios de la dignidad. Ya ni para qué si quédase mal ante una referencia del amigo o bloquéaselo in ciberspatium aduciendo que hízoselo por accidente o cuando no acéptase una crítica veraz proferida in honorem veritatis, amén de las fanfarronerías y truculencias que descúbrense en los patrañeros para que sus caretas cáiganse a fin de contemplar con acrimonia su monstruosidad pues una vez caído el velo que cubríalos, algunos llegan a los execrables campos de la vileza y la ruindad adversum dignitatis. Y si la palabra en ristre apúntase para desenmascararlos es común que los falsarios inficiónanse de la mentira dejándose poseer por la mitomanía, a fin de refutar a la apodíctica verdad que descúbrelos redarguyendo que «lo negro es blanco» o que «la noche es día» y confirmando, ex tota claritas, como decía Dostoievski, que de tanto mentirse a sí mismos escuchan sus propias mentiras en los oídos de su corazón hasta no distinguir la verdad dentro de sí. A fortiori/ con mayor razón, pierden el respeto de sí mismos y de los demás y si déjanse capturar de la soberbia o la egolatría jamás admiten su perverso modus actuandi a fuer de justificarse ante su mitomanía por la que viven en un mundo paralelo actuando como talentosos actores del teatro de la falsía.


Dígase entonces, ad concludendi, en este «DÍA MUNDIAL DE LA AMISTAD», que la verdadera amistad fúndase en LA VERDAD entre personas que dan y reciben prodigando confianza y respeto entre sí para vivir en paz y armonía con la certeza de hallarse bien acompañados, comprendidos y queridos in via veritatis. Así, la amistad vuélvese una forma de enriquecimiento personal por el cual apréndese la reciprocidad del dar y recibir creando una «collegialitas efectiva» o «colegialidad efectiva» para hacer un mundo más humano y placentero inter nos, in vita communitatis et super omnia in via fraternitatis et in honorem caritatis.

Diego Demetrio Orellana

Datum Conchae, mensis februarii, die XIV, currentis Anno Domini MMXXII, in Diem Mundialem Amicitiae, Octava Dominica in septuagésima.


OPINIONES CIUDADANAS

nelly benavides <direcnelly@yahoo.com>
Para:DIEGO DEMETRIO ORELLANA

mar, 15 feb a las 17:52


Estimado Diego:

Como siempre, su vasto conocimiento aplicado a un buen artículo sobre la amistad; lo tristísimo es la verdad de fondo, saber que ya casi no existen seres humanos que ofrecen ninguna amistad; es una especie en extinción, esa es la razón por la cual este mundo está plagado de bestias como actores de falacias e infamias y muchas bestialidades como respuesta de sus semejantes, que tienen iguales o peores características. Por eso este mundo ya es invivible para seres humanos; honestos, sinceros y correctos.

Cordial saludo,

Dra. Nelly Benavides
Quito - Ecuador

1 comentario:

  1. Se ha perdido el tiempo dónde los valores y los proncipios eran una raiz fundamental o la célula y esencia tanto en los hogares como en la sociedad estamos rodeados de seres fríos y materialistas con pérdida de respeto y honestidad .No hay amigo no hay verdad todo circula bajo imtereses vanos con una sonrisa burlona piensan alcanzar todo o ser impotantes con um corazón duro y una mente fría
    De ud como.todo un profecional es una aclaratoria como esta viviendo el mundo. Felisitaciones.

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