In culturalis res et in honorem
veritatis debemos denunciar que un gravísimo escándalo de impredecibles
consecuencias ha producídose in urbe nostra el día viernes 15 de
febrero del año en curso.
Mesa directiva del concurso de oratoria
Silvia Rosales, directora del Área de Lengua y Literatura
del colegio nacional «Benigno Malo»
Elsa Tenesaca, maestra del Área de Lengua y Literatura
del colegio nacional «Benigno Malo»
Ese día, en el colegio nacional
«Benigno Malo», llevóse a cabo un concurso interno de oratoria, el cual ha sido
preparado con un denodado esfuerzo y gran experticia por parte de las distinguidas maestras Elsa
Tenesaca y Silvia Rosales, apasionadas de profundis por la cátedra de Literatura con la pasión que el amor a la cultura reclama in veritatis splendor.
Los participantes fueron 12 estudiantes benignistas, entre los cuales -dicha sea la verdad- la selección era difícil puesto que sus virtualidades y eminentes capacidades para la oratoria daban cuenta de la existencia de un gran nivel discursivo en los actuales estudiantes del colegio nacional «Benigno Malo», por lo que el público asistente tuvo el privilegio de contemplar a una pléyade de jóvenes oradores con grandes talentos y promisorios triunfos in nostra communitate.
María Eugenia Racines, cuestionado jurado calificador del certamen
Tania Rodríguez Rodríguez, cuestionado jurado calificador del certamen
César Delgado, integrante del cuestionado jurado calificador
Agustín Sánchez Moscoso, integrante del cuestionado jurado calificador
El certamen llevóse a cabo en el
coliseo institucional, adonde concurrieron como jurados dos desaforadas feministas de la urbe, bautizadas, in nostra Sancta Mater Ecclesia, con los nombres de: María Eugenia Racines y
Tania Rodríguez Rodríguez. Ellas, junto a César Delgado, ex profesor benignista de vieja solera institucional, y Agustín Sánchez Moscoso, destacado ex alumno
benignista, debían cumplir el papel de jueces en el desafortunado concurso
retórico, mas las desaforadas feministas no supieron cumplir eficientemente su grave
responsabilidad provocando en el auditorio un rechazo absoluto a su dictamen
por haber premiado a una señorita que, en opinión de la mayoría de asistentes, no debía haber ganado la contienda frente a
superiores oradores que fueron desplazados de la premiación en forma
completamente discriminatoria, pues el dañino modus actuandi del que parece que estaban inficionadas las escandalosas jueces Racines y Rodríguez hizo que, per
fas et per nefas, el feminismo loco y desaforado que hace de las suyas
in vita communitatis provocara una perturbación mental en estas féminas para influir en los jurados varones y obligarles a emitir con ellas un dictamen digno de ludibrio y oprobio in
communitate nostra.
Mateo Calero, perjudicado por el jurado calificador
In via veritatis, digamos
que en el concurso presentóse como participante el señor Mateo Calero, quien
demostró inusuales dotes oratorias a los asistentes, habiéndose granjeado los
aplausos apabullantes de la muchedumbre y ganándose la impresión colectiva de
que él sería el triunfador del certamen, ora por su encantadora elocuencia, ora por las gesticulaciones
muy bien manejadas, ora por el tema perfectamente desarrollado, ora por los
recursos retóricos con los que, de momento ad momentum, cautivaba al
auditorio ex admirationem.
Ariel Jaramillo, perjudicado por el jurado calificador
Asimismo, en el certamen, otro de
los participantes que logró bastante «aura popularis» o «favor
popular» fue el señor Ariel Jaramillo, quien mostró una buena
elocuencia, un formidable dominio del discurso, una gran capacidad retórica y
un tono de voz convincente, pero fue igualmente desplazado por estas feministas que hicieron tabla rasa de los merecimientos de tan destacados
estudiantes en el certamen literario.
Jhandri Castro, perjudicado por el jurado calificador
Semper idem, presentóse al concurso
Jhandri Castro, con una gran capacidad expresiva, un perfecto manejo de
recursos retóricos, un solvente y cautivante discurso, pero indefectiblemente fue
descalificado por las aviesas feministas que, según puédese columbrar, parecían actuar con miradas antipatriarcales, acaso considerando que los méritos de los hombres fuesen inferiores a las
virtualidades femeninas in historia mundi.
Agustín Sánchez Moscoso, el tercer miembro del jurado calificador, ha declarado a la bibliotecaria del plantel, Yolanda Gallegos, luego de arrepentirse del veredicto al que fue inducido por las feministas, que «él no está de acuerdo con el dictamen de sus compañeras jueces feministas», agregando que para él «el merecedor del premio era Mateo Calero, a quien expresó su solidaridad luego de escuchar el cuestionado veredicto» que dejó patidifusos a todos los asistentes al evento literario.
Sin embargo, la ríspida y nada agraciada feminista Racines fue entrevistada por el autor de estas líneas acerca de la barbaridad que cometieron al premiar sin méritos a la triunfadora y, dentibus albis, -con el cinismo propio del extremismo que provoca el feminismo loco y desaforado en la comunidad cuencana- respondió las siguientes expresiones que transcribímoslas ad peddem litterae: «Reconozco que la chica se olvidó el discurso, pero a la chica le hace falta trabajar un poquito en su elocuencia y en el movimiento de sus manos, pero el discurso me encantó y por eso le premiamos como la mejor». Inadmisible respuesta de una desaforada y, al parecer, insana feminista que no supo cumplir su papel de jurado y que ni rubor alguno tiene para reconocerlo.
Ese feminismo loco y desaforado que perturba a nuestras conciencias es digno de abominación in communitate nostra, pues las desfachatadas y feroces feministas que salen a las calles de la ciudad cargada de alma desgañítanse pidiendo el aborto y desnúdanse delante de los templos, tatuando sus deformes cuerpos y mostrando que el escándalo es lo que cuenta y no la razón para trastocar los valores morales de nuestra comunidad poniéndolos patas arriba con tal de exigir libertinaje, libertinaje y mil veces libertinaje in vita communitatis et contra dignitatis sed contra veritatis. Desde este espacio de crítica y opinión cultural protestamos por este inicuo modus actuandi en un certamen literario que no tenía que ser empañado de forma tan calamitosa.
Lamentablemente, cuando trátase de reivindicar las luchas de las mujeres por parte de trasnochadas feministas
incúrrese en una miopía para actuar contra veritatis al premiar certámenes
literarios en donde la imparcialidad debería ser la norma para justipreciar
adecuadamente quién es de veras el merecedor de un premio in excelsis.
In culturalis aspectibus, el feminismo
loco y desaforado intenta arrasar con nuestros valores morales por causa de la
ignorancia crasa de mujeres de ánimo calenturiento que por haberse parapetado en
la camioneta de la lucha feminista actúan como remolcadoras que arrasan contra
todo vestigio de moralidad in patria aequatorianae. Es lamentable que este escándalo haya dejado
al público asistente al concurso de oratoria con un sabor agridulce por el cuestionado veredicto
feminista producido por la ignorancia supina y tenebrosa de personajes que son
nombrados sin méritos como jueces de un certamen retórico, hecho que infama a
la «Atenas del Ecuador», urbe que ha sido siempre afecta a las grandes
manifestaciones del espíritu y a la cual se la atropella, diem per diem, contra
intelligentia et semper adversas sapientiae in culturalis res.
Salutem dicit in Iesu, Pontifex
qui dilexisti nos et lavisti nos a peccatis in sanguine tuo,
Diego Demetrio Orellana
Datum Conchae, mensis februarii, die XVI, reparata salute Anno Dominicae Incarnationis MMXIX, octava V dominica per annum.
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OPINIONES CIUDADANAS
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IN VIA IUSTITIAE, DIGAMOS QUE LA INDIGNACIÓN DE LOS ESTUDIANTES ANTE EL VEREDICTO INFECTADO DE FEMINISMO LOCO Y DESAFORADO HA LLEGADO A NIVELES INSOSPECHADOS Y DECENAS DE MUCHACHOS, EN PROTESTA POR ESTA INJUSTICIA INDUCIDA POR LAS FEMINISTAS RACINES Y RODRÍGUEZ, HAN COLOCADO TODAS SUS FOTOS DE PERFILES EN EL FACEBOOK, EN COLOR NEGRO, CURIOSA MANERA DE LEVANTAR SUS VOCES DE RECHAZO ANTE EL JURADO QUE PERJUDICÓ A LOS TALENTOSOS ORADORES DE ESTA INSTITUCIÓN CENTENARIA IN URBE NOSTRA. AD EFFECTUM VIDENDI:
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OPINIONES CIUDADANAS
Lo he leído... Muchas gracias, es reconfortante. Gracias nuevamente, entiendo que mis maestras estarán de nuestro lado. En verdad, no tengo palabras. Muchas Gracias.
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Que tal, bueno la mayoría de
lectores y conocedores del caso comparten la opinión de lo injusto que fue y
que Mateo debía ganar pero también hay quienes se preocupan por Johanna y la
situación en la que se encuentra entre todo esto. De acuerdo y muchas gracias;
sé que su artículo no fue con mala intención; solo destacó la realidad sobre el
jurado, espero a ver cómo sigue pues esto aún no ha acabado. La verdad, me
asombré aún más de los maestros y el chico Agustín. Fueron grandes personajes
dentro de la institución y realmente no pude creer eso. Es algo realmente
estúpido lo que las feministas hicieron. Todo bien que defiendan el género pero
deberían ser personas más pensantes; pero bueno esperar a ver qué sucede.
IN VIA IUSTITIAE, DIGAMOS QUE LA INDIGNACIÓN DE LOS ESTUDIANTES ANTE EL VEREDICTO INFECTADO DE FEMINISMO LOCO Y DESAFORADO HA LLEGADO A NIVELES INSOSPECHADOS Y DECENAS DE MUCHACHOS, EN PROTESTA POR ESTA INJUSTICIA INDUCIDA POR LAS FEMINISTAS RACINES Y RODRÍGUEZ, HAN COLOCADO TODAS SUS FOTOS DE PERFILES EN EL FACEBOOK, EN COLOR NEGRO, CURIOSA MANERA DE LEVANTAR SUS VOCES DE RECHAZO ANTE EL JURADO QUE PERJUDICÓ A LOS TALENTOSOS ORADORES DE ESTA INSTITUCIÓN CENTENARIA IN URBE NOSTRA. AD EFFECTUM VIDENDI:
MAS, IN VIA VERITATIS, SON LOS PROPIOS COMPAÑEROS DE MATEO CALERO, EL VERDADERO GANADOR DEL CONCURSO DE ORATORIA, QUIENES AVALAN SU TRIUNFO AUNQUE LAS AVIESAS, LOCAS Y DESAFORADAS FEMINISTAS HAYAN DECIDIDO PERJUDICARLO, COMO PUÉDESE VER AD INFRA:
Ya no llores:.
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Excelente publicación aunque cada quien elige un ganador por la manera en la cual el discurso le llega
ResponderEliminarY no obstante, les llegó un discurso.inesperado...!
Interesante... buena postura ante la adversidad...
ResponderEliminarEsa vieja de la Racines era mala cuando fue rectora de la Asunción... Odiaba a los hombres. No me extraña que les ha perjudicado a esos muchachitos, peladitos... Tatay... Y todavía pidiendo el aborto en las calles. Vieja: ya estás vieja y patuleca y sigues loca.
ResponderEliminarQué pena siento de mi colegio... Que unas feministas vengan y perjudiquen el talento de los chicos por preferir a las mujeres me parece de lo último. A esa Racines no le deben llamar para jurado. Ya está jubilada y se nota que ya no tiene cerebro.
ResponderEliminarQué asco que hasta en la cultura hay corrupción. O sea que de este par de dos mujeres feministas hay que cuidarse... Van de jurados y lo que cuenta es la mal entendida liberación feminista de las abortistas que atacan a la Iglesia en las calles. Mamita Virgen del Cisne: estas marimachas son una plaga en nuestro Cuenca.
ResponderEliminarLamentable vulneración de derechos a los estudiantes del emblemático colegio Benigno Malo por haber sufrido negligencia y discriminación en la actividad encomendada al jurado calificador, que no ha procedido con ética en el concurso de oratoria. Mi solidaridad con los estudiantes perjudicados.
ResponderEliminarMartha Pesántez Ortega
educadora.
Pésimo jurado calificador. Se nota que no tenían razones para invisibilizar los méritos de los estudiantes que participaron en el concurso. Cuestionada actitud. Qué pena que se atropellen los derechos de los estudiantes que participaron en el certamen. Las señoras Racines y Rodríguez nunca pensaron en qué forma les afecta una injusticia de este tipo sicológicamente. Y qué vergüenza con los jurados varones que se han portado mandarinas y se dejaron mandar de las feministas. Eso sí es una vergüenza, señor César Delgado y señor Agustín Sánchez. Ustedes parece que se mean en los pantalones y se dejaron MANDAR de las señoras jurados o señoras juradas, pues como han sido feministas no aceptarán la palabra JURADO sino que han de decir que son JURADAS. jejeje... Yo quiero dejar alguito más en este espacio. A mí me han contado que la señora Racines sí es malita, bien malosa, como decía mi abuelita, mamitica, la Racines es de "mal corazón". Le gusta perseguir a los maestros en el magisterio; es una verduga de los maestros y ejecuta a cada rato los sumarios administrativos para aniquilarlos, en la misma forma como ahora les ha aniquilado a estos peladitos... Bienhechito pero que este historiador Orellana, con los huevos bien puestos, les ha sacado la madre a estas corruptas juradas. Te llegó tu hora: Racines... eso es lo que podemos decir. Pero yo no temo a las persecuciones de brujas malditas como estas, que además han de practicar vudú, y por eso, a ti te digo Racines: fuera del colegio Benigno Malo, sapa y corrupta, carajo. Y ya no escribo más porque me voy a emputar y he de terminar perdiendo mi cabeza.
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