In honorem Mater Dolorosae, publicamos una preciosa imagen del cuadro de la Dolorosa del Colegio «San
Gabriel», Mater Salvatoris, imagen venerada en la Joyería Vázquez in
urbe nostra. El marco de plata constituye un delicado trabajo de
filigrana en el que apréciase la gran tradición de orfebrería de los
descendientes de Ariolfo Vázquez Ortega, uno de los más exquisitos joyeros
cuencanos in historia nostra.
Ad contemplationem nostra, la obra es mayestática ad solemnitatem y en el borde
superior contémplase, admirabilis et originalis, una flor
labrada que muéstrase cual si fuese el punto focal que engólfanos hacia el
infinito espacio de la gloria celeste que proyéctase en la portentosa imagen de
divinal hermosura, flanqueada por un conjunto de delicados adornos vegetales
que circundan el cuadro en admirable lindeza, simetría y coherencia.
Cada uno de los elementos vegetales o florales resurge en un contexto barroco que evoca
la riqueza de nuestra historia del arte gracias a los joyeros que crearon joyas
preciosas ad gloriam Domini in patria aequatorianae. Ergo, en el barroquismo
del entramado por el cual el marco hállase pletórico de arte obsérvanse figuras que exornan de hermosura y atraen la atención de los espectadores
para detectar, ipso facto, singulares adornos que aparecen ora como ribetes
extraídos de nuestros tradicionales bordados artesanales, ora como adornos que
revolotean y juegan equidistantes en directa proporción para provocar euritmia
a la obra artística que, ad contemplationem nostra,
obsérvase cual si fuese una «opus magna» de la orfebrería
cuencana para albergar a la Mater Dolorosa, Mater Misericordiae,
cuya imagen es una estampa de vieja solera puesto que data del año 1950 y fue
obtenida en la capilla de la quinta de Nallig, que fuera de propiedad del
benemérito canónigo Roberto María Valencia.
Cabe decir, in via iustitiae, que el Reverendissime Pater Roberto María Valencia
es uno de los principales benefactores para la fundación del colegio «Rafael Borja»
en el año del señor de 1937. Cuenta la historia, in stricta iustitia, que
el sacerdote Roberto María Valencia, no contento con haber logrado su ansiado
sueño de ver fundado al Borja, donó a la Compañía de Jesús su quinta de Nallig,
en Gualaceo, para que fuera el sostén del amado colegio jesuita in
urbe nostra.
Allí, in sacris, en ese recinto, fue adquirida la estampa de la Mater
Dolorosa que ha sido enmarcada por la Joyería Vázquez con este marco artístico
que,
in stricta veritas, es quizás una de las joyas más exquisitas que han
dedicádose a la Mater semper amata in provintia aequatorianae Societatis Iesu y que, ad infra, en el borde inferior del marco tiene una curiosa inscripción que copiámosla ex integro, de verbo ad verbum: «A mi Madre Santísima, la Virgen Dolorosa del Colegio, que se la venera en la capilla de Nallig, del venerable y virtuoso sacerdote Sr. Dr. Dn. ROBERTO MARÍA VALENCIA. Consagro este recuerdo a la que milagrosamente me salvó la vida. Antonio Vázquez Ortega y familia. Nallig, agosto 20 de 1950».
MATER DOLOROSA, MATER SALVATORIS, ORA PRO NOBIS ANTIQUI SOCIETATIS IESU
ALUMNI IN CONCHENSE COLLEGIUM «RAFAEL BORJA». AD MAIOREM BEATAE VIRGINIS
HONOREM
Diego Demetrio Orellana
Datum Conchae, mensis decembris, die vicesimus, reparata salute Anno
Dominicae Incarnationis MMXVIII, octava Dominica de Gaudete.
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